La joven agredida por la Manada de Sabadell no puede reconocer a sus atacantes y solo uno va a prisión

telecinco.es 07/02/2019 13:16

El juez del Juzgado de Instrucción 2 de Sabadell después de escuchar las declaraciones del grupo, detenido por una supuesta agresión sexual a una joven de 18 años el pasado domingo, ha dejado a todos los detenidos en libertad con medidas cautelares, y a solo uno de ellos le ha enviado a prisión. Al resto les han quedado en libertad provisional, les han retirado el pasaporte, tienen prohibido abandonar el territorio nacional y deben comparecer con periodicidad semanal.

Llama la atención que los detenidos estén en libertad con cargos a pesar de que el propio juez reconoce que hay riesgo moderado de fuga. Uno ha sido enviado al Centro de Inmigrantes. Asegura el juez que no hay pruebas contundentes contra ellos. La realidad es que cinco de los jóvenes fueron detenidos porque vivían en una nave okupada, muy cercana al lugar de la agresión, pero por ahora nada más hay contra ellos. Las pruebas de ADN encontradas en el cuerpo de la chica sólo inculpan a uno de los detenidos. El único que está en prisión. Además, ha sido el reconocido por la pareja que auxilio a la chica tras la agresión. Otro de los posibles violadores ha quedado en libertad. La víctima reconoció su voz al ir con la policía al lugar de la agresión, pero el juez pone en duda su afirmación.

Así las cosas, el juez ha señalado que existen contradicciones entre la chica y sus amigos. La joven está tan afectada y bloqueada tras denunciar que ha sido violada por tres hombres que no ha podido reconocerlos en las ruedas de reconocimiento. Y se han hecho 35. Sorprene, no obstante, que los dejen en libertad sin haber recibido todos los analisis de ADN del lugar de la agresión. Un lugar por el que han pasado decenas de personas hasta que la policía ha decidido tapiar la puerta.

En su cara a cara ante el juez, cinco de los siete detenidos que declararon ante el juez se acogieron a su derecho a no declarar y los otros dos solamente contestaron a las preguntas de las defensas. Uno de los siete tenía una orden de expulsión de España, otros cuatro tienen un expediente de extranjería abierto y otro individuo tiene antecedentes por robo con fuerza.