La Fundación de Víctimas lamenta la muerte de su "gran dama" Vidal-Abarca

EUROPA PRESS 16/06/2015 16:15

La Fundación de Víctimas del Terrorismo (FVT) ha emitido este martes un comunicado en homenaje de la que fuera su presidenta, Ana María Vidal-Abarca, fallecida ayer, a la que califican como "una de las grandes damas de la defensa de las víctimas del terrorismo en España". "Era ante todo una luchadora pacífica y un ejemplo de superación personal", aseguran.

Informan de que Vidal-Abarca falleció anoche víctima de un cáncer a los 77 años de edad. Casada con el Comandante de Caballería y Jefe del Cuerpo de Miñones de Álava, Jesús Velasco Zuazola, y madre de cuatro hijas, vivió el 10 de enero de 1980 "el desgarro de una esposa que padece el asesinato de su marido a manos del grupo terrorista ETA en Vitoria".

"Tras este terrible golpe, Ana María abandonó el País Vasco para irse a Madrid, pero no se marchaba con las manos vacías. Ana María se trajo del País Vasco un deseo y un ansia: la lucha por la libertad y por la justicia. Y esa sería la bandera que enarbolaría desde entonces Ana María hasta el día de su muerte", relata la Fundación de Víctimas del Terrorismo.

FUNDÓ LA AVT EN 1981

Recuerda como en 1981, junto a Sonsoles Álvarez de Toledo e Isabel O'Shea, fundó la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), asociación que presidió durante diez años entre 1989 y 1999. "Con ese agudo sentido de la responsabilidad social y civil que caracterizó a estas tres luchadoras, la Asociación Víctimas del Terrorismo consiguió dar voz a las víctimas en un momento histórico en el que eran las grandes olvidadas de la sociedad española", defiende el comunicado.

Añade que "en un contexto adverso e indiferente a su trabajo, Ana María, Isabel y Sonsoles hicieron visibles a aquellos grandes abandonados de la sociedad, hombres y mujeres que sufrían en silencio y con miedo la infamia terrorista, y que en el mejor de los casos tenían que huir de sus pueblos y de sus hogares, si no contemplar con silencio y desgarro cómo perdían a sus seres queridos vilmente asesinados".

La Fundación recoge unas declaraciones pronunciadas por la fallecida en un discurso en la Universidad Carlos III cuando esta institución otorgó la medalla de honor a la AVT en 1999: "en nuestros comienzos, como me gusta decir entre otras cosas porque es absolutamente cierto, éramos pobres de solemnidad, pero siendo así ya resultábamos importantes, la víctima del terrorismo tenía una puerta a donde llamar, un teléfono donde iba a ser escuchada con todo cariño".

EN LA FUNDACIÓN DESDE 2001

En 2001, junto a Adolfo Suárez González, y con el apoyo de Fernando Benzo, Ana María se encargó de la puesta en marcha de la Fundación Víctimas del Terrorismo, entidad en la que permaneció hasta el año 2005 primero como Vicepresidenta y después como Presidenta. Desde esta institución pública, aglutinadora de todas las asociaciones y fundaciones de víctimas del terrorismo, Ana María continuó luchando por los derechos de las víctimas en momentos de gran dificultad, como lo fue el año 2004, tras los atentados del 11 de marzo en Madrid.

"El recuerdo de Ana María Vidal-Abarca estará siempre presente en nuestros corazones, por su coraje, su entereza, su férrea defensa de los derechos humanos y de la justicia, y su ejemplo de superación constante. Las asociaciones y fundaciones de víctimas del terrorismo que integramos la Fundación Víctimas del Terrorismo lamentamos profundamente su pérdida y deseamos enviar nuestro más sincero abrazo a su familia", concluye.