El secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, cree que socialistas y 'populares' no deberían "hacer frentismo" sobre la situación de Cataluña para conseguir "arañazos electorales", porque lo que está en juego no es una "batalla electoral", sino "que se genere un sentimiento adverso en Cataluña".
"Tendríamos que intentar no hacer frentismo y menos entre nosotros porque cualquier cosa que pase en el conjunto de España va a depender sobre todo de que haya un alto grado de consenso entre PSOE y PP", ha dicho en declaraciones a la Cadena Cope recogidas por Europa Press.
Sobre el hecho de que el PSC haya vuelto a respaldar en el Parlamento catalán el llamado derecho a decidir, que el PSOE rechaza, ha opinado que el partido hermano del PSOE intenta hacer de "puente" con el "catalanismo tradicional y constitucionalista", aunque ha reconocido que "no siempre lo sabe conseguir o lo puede conseguir".
Así, ha pedido que se entiendan los matices en la posición de los socialistas catalanes, que viven "en un ambiente muy tensionado y muy crispado" por culpa del presidente de la Generalitat, Artur Mas, y del "independentismo".
Según García-Page, todos los socialistas tienen una visión del conjunto de España como una realidad muy diversa" pero "desde la unidad y con una única soberanía que es la del pueblo español". Y ha recordado también que el PSC quiere "que Cataluña siga vinculada a España", es decir, "lo contrario del independentismo".
"BRUTAL REFORMA" DE LA CARTA MAGNA
No obstante, ha reconocido que la posición del PSC incurre en una "cierta contradicción" porque quiere "pedir opinión al pueblo catalán pero siempre dentro del marco constitucional" y la Constitución eso no lo permite. Es más, ha advertido de que plantear "la simple posibilidad de una separación de Cataluña de España" necesitaría una "brutal reforma de la Constitución" que exigiría un referéndum en toda España para ser aprobada.
Además, el dirigente socialista ha aprovechado para combatir la expresión del "derecho a decidir", porque "se entiende popularmente como derecho a opinar, y es amable y humano". "Vamos a opinar, hasta ahí estamos todos de acuerdo, pero el derecho a decidir en realidad se corresponde con la unidad de soberanía", ha proseguido García-Page, recalcando que ese derecho a decidir "sobre el conjunto de España, y Cataluña es España, no es otra cosa, le corresponde al pueblo español".
"A MAS LE DARÍA LO MISMO LO QUE PIENSE EL PUEBLO"
Según ha dicho, esa es la posición de todo el PSOE y su partido no va a "discutir sobre lo esencial". Dicho esto, ha reprochado a Artur Mas estar llevando a Cataluña "a un callejón sin salida", hasta el punto de haber dicho "que le daba lo mismo lo que dijera la Constitución y el ordenamiento jurídico". Es más, se ha mostrado convencido de que "si Cataluña dijera que quiere seguir vinculada a España Artur Mas diría que le da lo mismo lo que piense el pueblo catalán".
Para el alcalde de Toledo, si la resolución del problema catalán depende "la cabeza va a ir bien" porque "hay sentido común" y si depende "del bolsillo" irá "mejor todavía" porque hay muchos años de experiencia en acuerdos financieros, pero lo más difícil será "gestionar los sentimientos" porque la situación ahora mismo está "muy inflamada" y necesita "antibiótico político".