"El PP tiene interés en no hablar de los problemas de nuestro país", ha denunciado Garzón en declaraciones en el Congreso y, con esta decisión lo que hace es "echar más gasolina al fuego" en el asunto de las relaciones con Cataluña.
Para Garzón, el Gobierno no ha cometido "una torpeza" sino que el veto a las banderas independentistas ha sido "un acto premeditado" para "entrar en campaña electoral".
A su juicio, en los estadios de fútbol "no se debería prohibir ninguna bandera que no sea ilegal" porque la exhibición de símbolos no ilegales en los eventos deportivos está amparada por la libertad de expresión. "Los ciudadanos acuden a ver deporte y divertirse y tienen todo el derecho a expresarse dentro de los límites que marca la ley y siempre con actitudes pacificas", ha añadido.