A través de una nota de prensa, la institución gubernamental subraya que estos cuatro jóvenes marroquíes portaban tres banderas de su país y fueron "conminados de inmediato" por las fuerzas militares españolas destinadas en el Peñón a abandonar el islote, "lo que sucedió sin necesidad alguna de emplear la fuerza" ni de proceder a su detención.
De hecho, la Delegación subraya que las fuerzas militares "prestaron auxilio" a este grupo, que, "voluntariamente", declaró que actuaba por "motivaciones económicas".
Con ello, la institución que en Melilla dirige Abdelmalik El Barkani deja claro que "no ha habido detenciones" con ocasión de un hecho que "algún grupo de activistas antiespañol quiere convertir en un acto de propaganda en contra de los intereses de España".
La Delegación del Gobierno recuerda además las diversas acciones emprendidas por el mismo grupo con el ánimo de focalizar en Ceuta y Melilla acciones de tipo partidista y contrarias a la soberanía española de ambas ciudades.
Por todo ello, el ente gubernamental condena y lamenta los hechos que se han producido y los circunscribe a los "intentos fallidos de tensionar y entorpecer las relaciones entre España y Marruecos".