Así lo ha asegurado el ministro en declaraciones a los periodistas antes de participar en una reunión de la Comisión de Igualdad y no discriminación del Consejo de Europa, que tiene lugar en el Congreso de los Diputados.
Fernández Díaz, que es diputado por Barcelona, ha subrayado que Rajoy ha dejado claro en la misiva que remitió a Mas que tiene "tiene una voluntad de dialogo sin fecha de caducidad", es decir, que el presidente del Gobierno ofrece al mandatario catalán un diálogo "ilimitado". Pero también ha incidido en que esa "voluntad de llegar a acuerdos", como "no puede ser de otra manera", sólo puede entenderse en el "marco de la Constitución y de la ley".
El titular de Interior ha recordado a Mas que, al igual que el resto de las autoridades públicas, cuando llegó al cargo juró o prometió "cumplir y hacer cumplir" la Carta Magna y el ordenamiento jurídico, y le ha recalcado que debería "hacer honor" a ese compromiso.
LA LEGALIDAD ES DEMOCRÁTICA
En este contexto, ha explicado que "no se puede contraponer la legalidad democrática a la legalidad jurídica o la legalidad española, habida cuenta de que España es un Estado democrático y de Derecho y, por tanto, la legalidad española por su propia naturaleza es una legalidad democrática".
"Si hay una confrontación entre la legalidad procedente de un parlamento autonómico y la legalidad del Estado quien dirime esas controversias es el Tribunal Constitucional", ha apuntado el titular de Interior. Así, ha insistido en que, dentro de la Constitución "cabe todo que se pueda acordar y sea razonable y conveniente para el interés general y para el bien común".
"Fuera de la Constitución, como es evidente, no cabe nada. Ese es el marco del diálogo y el marco de los eventuales acuerdos", ha aseverado Fernández Díaz, quien ha vuelto a denunciar que "lamentablemente algunos quieren dividir a la sociedad catalana y a la sociedad catalana del resto de la sociedad española".
Por contra, ha reafirmado que el Gobierno de Mariano Rajoy "está por la unión". "Juntos sumamos y divididos, evidentemente, somos todos más débiles y todos perdemos. El presidente lo ha dejado muy claro en su carta", ha concluido.