En concreto, el Consejo de Ministros ha aprobado un Acuerdo por el que toma razón de la contratación por el procedimiento de emergencia de estas obras de seguridad, cuyo coste del contrato asciende a 176.821,52 euros.
Según explica el Ejecutivo, las obras están motivadas por la situación de inseguridad generalizada que afecta a la actividad administrativa de la misión española en Kabul y a los movimientos de su personal.
Además, es necesario establecer la Cancillería de la Embajada en un nuevo edificio tras el atentado terrorista que le afectó en diciembre de 2015. En él, fallecieron dos miembros del Cuerpo Nacional de Policía.
El Ejecutivo argumenta que la situación de inseguridad "permanente" de la zona requiere de nuevas medidas tanto físicas como electrónicas y de equipación en la misión española, con fortificación de su perímetro y construcción de garitas de vigilancia.
También se llevará a cabo la instalación de zonas altamente protegidas, como las denominadas 'habitaciones del pánico', en el interior de los edificios de la Representación y se refuerzan las medidas de seguridad en el edificio utilizado como residencia de la Embajada.