La Guardia Civil sitúa a Trapero dentro del organigrama del Govern para la independencia

Informativos Telecinco / Agencias 09/10/2017 20:38

La Guardia Civil argumenta sus conclusiones entre otras informaciones en un documento incautado el pasado día 20 de septiembre, denominado "EnfoCats. Reenfocat el procés d'independencia per a un resultat exitós", en el registro del domicilio particular de Josep María Jové, secretario general de la vicepresidencia de Economía y Hacienda y número dos de Oriol Junqueras.

Este documento analizado por la Guardia Civil en las diligencias enviadas a la Audiencia Nacional dice que el citado documento establece dos comités, uno estratégico y otro ejecutivo. El comité estratégico, según la Benemérita, define los grandes objetivos y una misión esencial: la independencia de Cataluña.

Del mismo forman parte el presidente y vicepresidente de la Generalitat, los presidentes y portavoces de los grupos parlamentarios independentistas y los presidentes y vicepresidentes de las entidades soberanistas: ANC, Omnium Cultural y la Asociación de Municipios Independentistas, "recordando aquí -dice el texto- las figuras de Jordi Sánchez Pincayol y Jordi Cuixart Navarro, quienes se encuentran en una posición decisoria similar a la de Carles Puigdemont y Oriol Junqueras".

El documento de la Guardia Civil, al que tuvo acceso Europa Press, continúa diciendo que en el "Comité Ejecutivo se incluyen los secretarios generales de presidencia y vicepresidencia, entre ellos José María Jové, los directores de las oficinas de desarrollo de autogobierno, profesionales expertos en los distintos ámbitos del proyecto, donde indudablemente se encuentra la figura de Josep Lluis Trapero, y consejeros o secretarios generales ad hoc según las temáticas a tratar".

TRAPERO EN LA EJECUCIÓN DEL PLAN

"Como vemos en ese organigrama -continúa el relato de la Guardia Civil- las figuras de Jordi Sánchez y Jordi Cuixart se encardinan en el diseño estratégico en tanto que Josep Lluis Trapero lo haría en la ejecución del plan".

Añade que este "no es un dato baladí" ya que durante el registro del día 20 en la Consejería de Economía, Jordi Sánchez comunicó a uno de los oficiales de la Guardia Civil que estaba en contacto con Trapero "por si quería hablar con él".

Insiste en que esta situación "perdura en el tiempo hasta el referéndum del 1 de octubre cuando los Mossos debían haber ejecutado actuaciones tendentes a paralizar el referéndum y lejos de ello hizo justo lo contrario". Agrega que esa situación no debe sorprender "a la vista de su encaje como estructura de estado de una Cataluña independiente y su connivencia directa con las entidades independentistas, especialmente ANC y Omniun".

La Guardia Civil considera que queda acreditado en el mencionado documento incautado en la casa de Jové, que además de la hoja de ruta de la independencia, se fija el papel que debe jugar cada uno de los actores y que en la práctica se corresponde perfectamente con todos los pasos que "hasta el momento viene ejecutando el Gobierno de la Generalitat, incluida una ya no descartable Declaración Unilateral de Independencia".

En otro momento del atestado, la Guardia Civil insiste en el papel jugado por Jordi Sánchez y Jordi Cuixart el día 20 de septiembre, "alentando a los congregados ante la sede del departamento de Economía" durante el registro, subidos a un vehículo de la Guardia Civil, llamando a la movilización permanente a favor del referéndum y en contra de las actuaciones para impedirlo.

También acusa a las dos organizaciones de impedir la salida de la comitiva judicial de la consejería de Economía. "Lo cual ya se sabía que era su intención como se dedujo de las diferentes consignas y llamamientos realizados por los coordinadores de la manifestación: Jordi Sánchez y Jordi Cuixart", argumenta.

La Guardia Civil vuelve a criticar la actuación de los Mossos ese día 20, ya que pidieron su ayuda sobre las diez de la mañana, requiriéndoselo a la Intendente de Mossos Teresa Laplana, sin que no fuese hasta las dos y media de la tarde cuando se presentó un responsable para valorar la situación.

Concluye este punto asegurando que "esa inacción de Mossos no es arbitraria sino que se corresponde al papel que ese cuerpo policial juega en la estrategia hacia la independencia como brazo ejecutor de las tareas que le encomienda el comité estratégico, en el que Sánchez y Cuixart tienen un papel trascendental".

CONVIVENCIA CON EL REFERÉNDUM EL 1 DE OCTUBRE

El atestado vuelve a acusar de connivencia a la cúpula de los Mossos en la jornada del referéndum ilegal del 1 de octubre, explicando que decidieron "no actuar y en todo caso, llegar a obstaculizar la actuación de las otras policías".

"Y esa realidad -añade- no pudo recaer en la voluntad individual de los agentes, sino que más bien respondió a un plan premeditado para evitar actuar y que no podía más que proceder de la cúpula policial de los Mossos, cúpula comandada por Trapero y en conexión directa con Puigedmont, Junqueras, Jordi Sánchez y Cuixart".

ACUSAN AL DIRECTOR GENERAL DE LOS MOSSOS DE MONTAR "CONTRAVIGILANCIAS"

Del mismo modo, la Guardia Civil ha acusado al director general de los Mossos d'Esquadra, Pere Soler, de montar "contravigilancias" para "blindar" a los miembros de la Generalitat y a los organizadores del referéndum del 1 de octubre a pesar de la suspensión del Tribunal Constitucional. También se acredita que los organizadores de la consulta disponían de "un sistema de información para organizar la resistencia" en la calle.

En el informe remitido a la Audiencia Nacional figuran numerosas conversaciones telefónicas autorizadas por el Juzgado 13 de Barcelona. En una de ellas, el 29 de septiembre, el director de Patrimonio de la Secretaría de Hacienda, Francesc Sutrias, le dice a Pere Soler (fue nombrado director de los Mossos el pasado 18 de julio) que "necesita estar tranquilo en su despacho, su coche y su casa".

El máximo responsable político de la policía autonómica le contesta que "ha aumentado la contravigilancia a los que han estado expuestos"."Como se observa", advierte la Guardia Civil, "la Generalitat utiliza a su policía autonómica para realizar funciones de protección y seguridad de sus miembros, no contra acciones de terceros que puedan infringir la ley para tratar de perjudicarles, sino contra la actuación de un juez o de una investigación policial".

"Es obvio", añade el instituto armado, "que las órdenes para el cumplimiento de los requerimientos se transmiten a través del jefe policial, Josep Lluís Trapero". En el intento de "blindar a los miembros del Gobierno catalán", la Guardia Civil destaca que los investigados el 20 de septiembre por el Juzgado 13 de Barcelona utilizaron precauciones y sistemas de contravigilancia "propios del comportamiento de delincuencia organizada".

Para ello, usaron sistemas de mensajería que no son susceptibles de intervención y recurriendo a "diálogos prácticamente surrealistas" para dificultar la labor policial. "Demuestra un grado de conocimiento de las técnicas policiales de investigación", apunta el instituto armado.

La Guardia Civil ha acusado a los organizadores del 1-O de "montar un sistema de información" que cubría los movimientos que realizaban tanto el instituto armado como la Policía Nacional para que los responsables del referéndum ilegal del 1 de octubre que se encontraban en cada colegio organizaran la "resistencia adecuada para evitar la entrada en el mismo y que pudieran intervenir las urnas".

Para ello, "en ocasiones se montaron barricadas y en otras colocaron a ancianos y a niños en primera línea para disuadir a los agentes", según recoge el atestado.

INTERVENCIONES TELEFÓNICAS

Tras la autorización del Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona, la Guardia Civil ha enviado a la Audiencia Nacional las intervenciones telefónicas de varios altos cargos a los que se sitúa en el entramado de la organización del referéndum del 1-O.

Estos altos cargos son: el exsenador de ERC Santiago Vidal; el director del Instituto de Estudios de Autogobierno de la Consejería de Presidencia, Carles Vivier Pi-Sunyer; el secretario general de la Vicepresidencia de Economía, Josep María Jove; el director de Patrimonio de la Secretaría de Hacienda, Francesc Sutrias; la directora de Servicios de Economía, Natalia Garriga; el técnico en Tecnologías de la Comunicación Joan Manel Gómez; y el responsable de la Fundación Puntcat, Josep Masoliver Puig.

CONNIVENCIA ENTRE MOSSOS Y ALTOS CARGOS

A los agentes de Policía Judicial les llama la atención la actitud de los Mossos d'Esquadra y su connivencia, de acuerdo a las intervenciones telefónicas, con los altos cargos detenidos el día 20 por orden del Juzgado 13 de Barcelona. De esto da cuenta el técnico Joan Manel Gómez cuando por teléfono revela que, estando en los calabozos, "el cabo jefe de la sección" le transmitió su "apoyo y lo que sea". "Mucha fuerza y muchas gracias por lo que estáis haciendo, fuerza, fuerza", le dijo el policía durante su arresto.

El alto cargo de la Consejería de Presidencia Carles Vivier Pi-Sunyer explica en otra conversación intervenida por la Guardia Civil que Jordi Cuixart, presidente de Òmnium, juega un papel relevante en las movilizaciones. "Tiene la suficiente autoridad para decidir cuándo se debían de celebrar las manifestaciones y cuándo no en función de las prioridades o ventajas que la situación les marque".

Las intervenciones telefónicas acreditan que los organizadores del referéndum tenían el "total convencimiento que fue la presión popular" el día 20, cuando los registros en varias consejerías, "la que impidió que las detenciones llegasen hasta el presidente Puigdemont o el vicepresidente Junqueras, y que los agentes habían valorado que si las realizaban podían tener un problema". También constatan que ven improbable mantener el "control que ejercen de la ciudadanía" hasta el 1-O.

En otro momento del atestado, es la mujer de Josep María Jove, el que fuera número dos de Oriol Junqueras, el que transmite a su marido que "un tal César" le había enviado un mensaje por si tenía que reunirse "con el mayor", en referencia al jefe de los Mossos, Josep María Trapero.