Después de un acto en L'Hospitalet de Llobregat, Fernández Díaz ha asegurado no ver "ninguna relación de causa-efecto" entre esta polémica y el liderazgo del partido en Cataluña, que ocupa Alicia Sánchez-Camacho.
CiU ha pedido que ella explique en el Parlament las afirmaciones que se le atribuyen en los fragmentos de conversación difundidos esta semana en las redes sociales, y en los que la dirigente popular "admite tener interés en perjudicar a CiU y asegura que cuenta con un fiscal de confianza", según la federación.