El eurodiputado y alcalde de Sant Vicenç dels Horts (Barcelona), Oriol Junqueras, ha sido proclamado este sábado nuevo presidente de ERC, un cargo que asume con el reto de cerrar una etapa marcada por las luchas internas y las derrotas electorales y para hacer del partido una "fuerza hegemónica".
En el congreso que los republicanos han celebrado en Girona, ha centrado su discurso en fortalecer la autoestima de la militancia, más que en esbozar el futuro del partido a corto plazo: "Recogemos las lecciones de la experiencia, llevamos el alma empapada de emociones, y trabajaremos con espíritu de reparación y justicia".
A menos de dos meses para las elecciones generales y con las encuestas adversas, ha advertido que su partido "no se dejará intimidar por un mal resultado electoral" y trabajará para volver a saborear los buenos tiempos del pasado.