La representante de la Fiscalía de Madrid ha mantenido este jueves su solicitud de condena de 18 años de prisión para una acusada del intento de asesinato de una octogenaria, a quien clavó el 30 de abril de 2010 en repetidas ocasiones unas tijeras en la cabeza y en el cuello en su vivienda de Alcalá de Henares.
En la última sesión de la vista, la fiscal ha señalado que están acreditados los delitos de asesinato en grado de tentativa y robo con violencia de los que se acusa a Mª Isabel P.G. y ha recalcado que está probado la alevosía y el ensañamiento en la actitud de la enjuiciada.
Por su parte, la abogada de la acusación particular ha solicitado que se condene a la acusada a 25 años de cárcel, mientras que el letrado defensor ha reclamado al tribunal que aprecie en el delito de asesinato en grado de tentativa una atenuante de arrebato y se tome en consideración un desistimiento voluntario al cambiar de opinión en su acción.
La procesada, que se encuentra en libertad provisional, aseguró en su declaración que no recordaba nada, si bien relató que el día de los hechos bajó al piso de su vecina, de 80 años, para pedirle prestados 50 euros. "Me dijo que no. Me dijo que pasara. Ya no recuerdo más. Me debía dinero porque le hacía la limpieza. Me enganchó por los pelos. No recuerdo muy bien lo que pasó. Empezó a insultarme", narró.
En su informe, la fiscal ha recalcado que existe prueba suficiente contra la procesada para enervar su presunción de inocencia. "Su actitud fue sorpresiva y fue ideada para causar la muerte de la víctima", ha reseñado. "Le clavó unas tijeras e intentó asfixiarla. Luego cogió un trozo de madera y la pegó en reiteradas ocasiones", ha dicho.
Asimismo, ha recordado que la fase de instrucción manifestó que el día de los hechos perdió control. Sin embargo, la mujer aseguró en su declaración en el juicio que no se acordaba de nada de lo sucedido.
En su turno, el abogado de la acusada ha pedido al tribunal que valore que su cliente no es una persona violenta ni tiene antecedentes penales. "Se ofrecía a subirla la compra", ha dicho el letrado, quien ha señalado que no hubo ninguna amenaza previa de muerte que pudiera inducir un ánimo de matar.
VERSIÓN DE LA FISCALÍA
Según el fiscal, la procesada se dirigió el 30 de abril de 2010, en torno a las 14:00 horas, a la vivienda de su vecina Eusebia Romana, de 87 años de edad en el momento de los hechos. Así, le propinó un empujón para, inmediatamente y ya en el interior de la vivienda, cerrar la puerta de entrada.
"Acto seguido, y esgrimiendo unas tijeras de cortar pescado, con la intención de acabar con la vida de Eusebia, se las clavó repetidamente en la cabeza y en el cuello", señala el fiscal. La víctima logró zafarse de María Isabel y se dirigió al dormitorio con la intención de ocultar dentro de una almohada 400 euros que escondía en un armario.
Fue en ese momento cuando la procesada le quitó los 400 euros junto con un monedero en el que había otros 21 euros. Llegados a este punto, María Isabel rodeó el cuello de la anciana con una toalla de baño y presionó con fuerza hasta intentar asfixiarla.
No lo logró, de modo que, arrastrándola mediante la toalla, la condujo hasta un sofá donde reiteradamente le golpeó en la cabeza, en el cuello y en las extremidades superiores con un trozo de madera en cuyo extremo había un clavo, objeto con el que se hizo aprovechando uno de los brazos del sofá.
Ante la imposibilidad de acabar con la vida de Eusebia y de ejecutar, según la Fiscalía, todas las acciones contra ella con el ánimo de intensificar el dolor de la anciana, María Isabel abandonó el domicilio con el dinero anteriormente mencionado.