El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha admitido a su entrada al Congreso para asistir a los actos del 35 aniversario de la Constitución, que la Carta Magna "se puede reformar", aunque a continuación ha fijado tres requisitos imprescindibles: "que exista un consenso muy amplio", tanto como el que se puso de manifiesto para su aprobación; que "los objetivos sean claros" y, finalmente, que el cambio "sirva para unir y no para dividir". Rajoy ha hecho un balance "absolutamente positivo" de los 35 años de vigencia de la Carta Magna que ha propiciado no solo democracia, bienestar y prosperidad a los españoles, sino también "un modelo de Estado que distribuye el poder por todo el territorio" y ha expresado su deseo de que sean "muchos más" los años que celebremos su cumpleaños. En una breve declaración ante los medios, el jefe del Ejecutivo ha destacado que la Constitución ha sido el marco en el que ha ido progresando el bienestar de todos los españoles y ha afirmado que está "en pleno vigor".