El texto de Anadir se registró en la Cámara Baja a finales del pasado mes de septiembre, cuando ya se habían disuelto las Cortes por la convocatoria de elecciones. Por este motivo, el órgano de gobierno de la Cámara no había analizado hasta ahora la petición de esta asociación.
La iniciativa perseguía que el Congreso crease una comisión específica para investigar las adopciones irregulares que tuvieron lugar en España durante el franquismo y hasta bien entrada de la democracia.
Pero el Reglamento del Congreso establece sus propias normas para la constitución de una comisión de este tipo, que no puede crearse a través de una iniciativa legislativa popular. Por eso, la Mesa del Congreso rechazó tramitar la iniciativa, lo que ha provocado la protesta de presidente de Anadir, Antonio Barroso.
La alternativa que le queda a los peticionarios es intentar convencer a dos grupos parlamentarios o a la quinta parte de la Cámara (70 diputados, lo que implica contar con PP o PSOE), para que soliciten formalmente la creación de una comisión sobre los niños robados y el asunto llegue a debatirse en el Pleno de la Cámara Baja.