La presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundúa, ha advertido, en declaraciones a Europa Press, de que no es el momento más adecuado para crear un Centro de la Memoria en el País Vasco que está impulsando el Gobierno de Patxi López ya que, a su juicio, no se dan las "condiciones políticas, éticas o morales" para ello.
Pide una "regeneración social" y alerta de que tras la apariencia de que "todo es muy bonito" porque ETA no asesina ahora se esconde el "chantaje" a toda la sociedad con la amenaza de hacerlo y una "operación incansable de fondo de ETA y su entorno para salir vencedores" políticamente tras la estrategia inaceptable del terror.
La presidenta de la Fundación de Víctimas hace estas afirmaciones tras las declaraciones vertidas a lo largo del verano por los dirigentes de Bildu, tratando de equiparar a las víctimas del terrorismo con quienes han causado su dolor y después también de las declaraciones del presidente de la Diputación de Guipúzcoa, Martin Garitano, quien distinguió entre víctimas catalanas, por el apoyo del nacionalismo catalán a Batasuna, y el resto de víctimas.
El Centro de la Memoria es un proyecto del Gobierno de Patxi López, apoyado por el Gobierno Central, como se puso de manifiesto el pasado mes de julio en la reunión que mantuvieron el consejero del Interior, Rodolfo Ares y el ministro Antonio Camacho.
En declaraciones a Europa Press, Maite Pagaza ha recordado que "instituciones importantes de la sociedad vasca hablan de equidistancia y están buscando la impunidad y apoyan a los victimarios" por lo que ha considerado "oportuno" establecer antes cuál debe ser el modelo de un Centro de la Memoria.
"Ahora mismo en el País Vasco no se dan las condiciones políticas, ni morales ni éticas", sostiene. "Falta mucho para llegar al Centro de la Memoria, fíjate como estamos todavía", ha insistido al tiempo que ha denunciado la "banalización del bien y del mal" y "la brutalidad moral que supone la exposición pública de lo injustificable por parte de los familiares y amigos de los asesinos".
LA BRUTALIDAD MORAL DE BREIVIK NO SE VE EN EUSKADI CON ETA
Incluso ha recurrido a la reacción de Anders Breivik en Noruega, quejándose por el aislamiento y no poseer acceso a internet para lamentar que "la brutalidad moral y la frivolidad egocéntrica de Breivik que se ve tan claramente, no se distingue con tanta claridad en la sociedad vasca respecto a cosas parecidas en asesinos etarras".
Ha acusado al entorno de ETA de "intentar colar una narración en la que a la Justicia no se le llame Justicia, a la verdad no se le llame verdad y a la falta de igualdad se le llame reconciliación".
Por ello ha abogado por una "regeneración social y política" en el País Vasco "y no una falsa reconciliación sobre palabras que parecen bonitas". "Hay palabras que parecen muy positivas, pero que lo que buscan avalar en el fondo es una enorme operación de irresponsabilización de ETA y Batasuna sobre su trayectoria sobre los daños realizados y librándoles de la necesidad social y política de condenarlos".
"En el caso de que aceptáramos esto --prosigue--, resultarían derrotados los valores del ordenamiento jurídico que marcan las reglas de juego democráticas y el respeto a la dignidad humana debido a quienes fueron utilizados y asesinados para llevar adelante la estrategia compartida entre ETA y Batasuna", ha alertado.
A la hora de hacer balance sobre el trato recibido por el Gobierno socialista en la era de Zapatero, Pagazaurtundúa ha dicho que "desde el punto de vista administrativo ha sido modélico", pero ha manifestado "claroscuros" en la "percepción de muchas víctimas" sobre el fondo de "moral política" que alumbró el modelo de fin dialogado con la banda terrorista. "El fin no justifica los medios", matizó.
"QUIEREN NORMALIZAR LA IMAGEN DE LO ANORMAL"
A su juicio, "España es uno de los estados que tiene una red asistencial y de protección administrativa, material, más importante del mundo". El de las víctimas de los fanatismos terroristas es un colectivo muy plural, pero "hay un número importante de ellas que ha sufrido mucho durante estos años, al hilo de lo que se ha venido en llamar "proceso". "Con todo ello hay gente que ha sufrido lo indecible", exclamó.
También se ha referido a "los discursos, la sobreactuación, ese cinismo público del mundo de Batasuna y ETA" que consiguen "la sobrerepresentación en los espacios públicos" mezclando la "brutalidad de fondo con el mayor descaro y narcisismo para normalizar la imagen de lo anormal", esto es, precisa, "que se acepte la complicidad y colaboración de fondo de ETA, con su estrategia política en el espacio público convencional, un espacio que debería estar vedado a los delincuentes, por antonomasia". "Esto abre las heridas de sus víctimas constantemente", concluyó.