El pleno del Parlameno balea ha rechazado, con el voto en contra del PP, una proposición no de ley del PSIB con la que pretendía que se reiniciase una negociación real con el comité de huelga de los docentes para poner fin al conflicto existente en el sector educativo.
La PNL que ha sido rechazada, pero que ha contado también con el apoyo de MÉS, incluía otros puntos dirigidos a rechazar la "actitud de provocación" de la Consejería de Educación, Cultura y Universidades, mostrar el apoyo de la Cámara al director del IES Marratxí y a cerrar de manera inmediata los expedientes a los directores de secundaria de la comunidad.
Además, se ha rechazado instar a la Consejería a no abrir ningún expediente más, ni al equipo directivo, ni al profesorado, en el ejercicio de sus derechos fundamentales, como el de expresión o el de huelga.
Durante la defensa de la iniciativa, la socialista Cristina Rita ha considerado estos expedientes como "casos flagrantes de gestión dictatorial" y ha destacado que, desde el anuncio de la huelga, "la situación no ha mejorado" y "continúa la irritación en la comunidad educativa".
Por su parte, el diputado de MÉS, Nel Martí, ha opinado que las "autopistas de la educación" prometidas por el presidente del Gobierno balear, José Ramón Bauzá, durante la campaña electoral se han convertido en "rotondas". Asimismo, ha acusado a la consejera de Educación, Joana Maria Camps, de "conculcar y robar el derecho a la educación" de los alumnos.
También, ha denunciado el "uso perverso y partidista" que hace el Gobierno insular del departamento de Inspección y ha considerado de "despropósito e invento antipedagógico" el modelo lingüístico del PP que se ha implantado "sin fundamento y sin diálogo".
La diputada del PP, Aina Maria Aguiló, ha criticado que una minoría pretenda "imponer un modelo lingüístico a una mayoría" y ha asegurado que los expedientes son "un acto administrativo reglado".
Por tanto, "la apertura de un expediente es la respuesta normal y obligada por un ilícito administrativo, se quiere confudir", ha manifestado Aguiló después de que la oposición acusase al Gobierno balear de "persecución" y de imponer "expedientes políticos".