El presidente del Congreso, Jesús Posada, ha reivindicado ante el Pleno de la Cámara el reconocimiento constante de las víctimas del terrorismo, que a su juicio debe ir unido a un compromiso por la convivencia en paz y en libertad entre los españoles.
El Parlamento rindió tributo este jueves a las víctimas del terrorismo en un acto en el que estuvieron presente la Fundación de Víctimas y las principales asociaciones, incluyendo la AVT. No pudieron hablar en el acto, al tratarse de una sesión plenaria, pero tienen la promesa de que el próximo año cambiará el formato para darles voz.
El único discurso que se escuchó fue el de Posada, quien recordó que ETA no comete atentados desde marzo de 2010 pero que, "aun cuando hubiese transcurrido mucho tiempo más, aun cuando se hubiese logrado vencer definitivamente el terrorismo, España nunca olvidará a sus víctimas".
ESPAÑA NO SE HA DOBLEGADO
Posada, que tuvo sentado a su lado al presidente del Senado, Pío García Escudero, explicó que durante "demasiados años" el terrorismo "ha llevado el dolor a las familias" pensando que España se doblegaría, "pero la historia reciente ha demostrado que el pueblo español sabe vencer las dificultades, sobreponerse y superar con éxito todos los desafíos a los que se enfrenta".
"Los españoles no hemos permitido que los terroristas triunfasen en sus propósitos desestabilizadores, hemos sido capaces de resistir su asedio y provocación, no hemos consentido que nos apartasen del rumbo que quedó diseñado en la Constitución", añadió.
A su juicio, para ello "el testimonio y la autoridad de las víctimas ha sido decisivo", "su ejemplo de valentía, fortaleza, serenidad y altura de miras han sido una lección", y ellas son las más legitimadas para reivindicar la concordia.
Por ello, cada homenaje debe contribuir a mantener viva la memoria de las víctimas, pero también para hacer un llamamiento a la paz y a la libertad, porque el reconocimiento "sería estéril o cuando menos insuficiente si no fuese unido a un renovado compromiso de todos en la lucha contra el terrorismo y a un compromiso aún más firme y decidido de salvaguardar la convivencia de democrática entre los españoles".
TRABAJAR POR LA PAZ
"Sirva este acto para reafirmar una vez más el deseo de seguir combatiendo contra el terrorismo con todos los instrumentos que nos ofrece el Estado de Derecho, para reafirmar nuestra condena más enérgica contra cualquier exaltación o enaltecimiento del terrorismo y para manifestar una vez más nuestra voluntad inquebrantable de seguir trabajando para garantizar una convivencia en paz y en libertad entre todos los españoles", resumió.
Tras el discurso, la Cámara guardó un minuto de silencio con los parlamentarios puestos en pie y dedicó una cariñosa ovación a las víctimas, representadas en la tribuna principal de invitados por la presidenta de la fundación de Víctimas, María del Mar Blanco, y las presidentas de las asociaciones AVT, Ángeles Pedraza, y afectados por los afectos del 11-M, Pilar Manjón.
En el hemiciclo se unieron diputados y senadores de los distintos grupos parlamentarios, así como buena parte del Gobierno, encabezado por la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, dado que el jefe del Ejecutivo asiste este jueves a la Cumbre Europea. Faltaron, eso sí, los diputados de Amaiur, que alegaron otro homenaje en Gernika a las víctimas "de todas las manifestaciones de violencia".
También estaban en las tribunas los presidentes del Consejo del Poder Judicial, Gonzalo Moliner, y del Tribunal Constitucional, Francisco Pérez de los Cobos, así como la defensora del Pueblo, Soledad Becerril, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y representantes del Gobierno vasco, de los Ejércitos y de las Fuerzas de Seguridad.