Es su derecho, elegir centro penitenciario. Podrá hacerlo siempre y cuando ingrese voluntariamente en el plazo establecido. Las opciones, diversas: a tranquila cárcel de Segovia, como escogió Jaume Matas, la moderna Estremera o pensar en sus vínculos familiares. Vitoria por su madre y hermanas o Cataluña si volviese Cristina de Borbón. Una vez escogido y confirmado el centro, pasará por el módulo de ingresos para acabar en lo que se conoce como módulos de respeto: unidades carcelarias tranquilas y sin atisbos de conflictividad, son los módulos donde se encuentran reclusos como Luis Bárcenas. Y algo más, tendrá que acostumbrarse a no salir de los los muros de la prisión hasta que cumpla un cuarto de la pena. Será en ese momento, cuando podrá empezar a disfrutar de permisos penitenciarios.