El PP pide que sea delito meter "las facturas en un cajón"

EUROPA PRESS 03/10/2011 19:48

El gasto autonómico y local se ha disparado y además lo ha hecho sin control, hasta el punto de que se han dejado "facturas ocultas en los cajones". Para Alberto Núñez-Feijóo, dejar facturas sin pagar, y además sin contabilizar, debería ser "delito". No es suficiente que las consecuencias sean "políticas", sino que debe haber también responsabilidades administrativas e incluso penales. Y es que en España se ha vivido una "ficción económica" de la que han sido responsables los gobiernos socialistas, en opinión del presidente de Galicia, lo que hace necesario un "gran acuerdo nacional" para "asumir la realidad las cuentas".

El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez-Feijóo, ha reclamado este lunes una reforma legislativa para que sea delito administrativo e incluso penal ordenar y aprobar inversiones y gastos en la administración pública que después de no se contabilizan, y que "las factura queden ocultas en un cajón".

En un desayuno informativo organizado por Europa Press, el presidente de la Xunta de Galicia ha afirmado que "esto no es solo una responsabilidad política". En su opinión, no es lo mismo gastar, aunque sea en inversiones "discutibles", algo que puede tener consecuencias políticas, que no contabilizar el gasto, por lo que hay que "distinguir" entre una cosa y otra. Así, Núñez-Feijóo ha abogado por que quien autorice esa ocultación, sea un presidente, un consejero o un director general, se enfrente a una legislación que incluya "seguro" responsabilidades administrativas e incluso penales.

"Cabe preguntarse si es lógico que hablemos de administraciones en quiebra, de facturas ocultas en un cajón, de disparar el gasto sin límite y estar a la vez exento de tener que responder por ello", ha apostillado el presidente de la Xunta, que ha criticado que los mismos que han hecho eso "se permitan censurar sin rubor las medidas que ahora tienen que tomar los que tiene la responsabilidad de sucederles y arreglar los agravios económicos que se han encontrado".

Además, Núñez Feijóo ha censurado que "la ficción económica" ha sido una "constante" en España durante los gobiernos socialistas, primero para restar importancia a la dimensión de la crisis y después para "desviar la atención" sobre el déficit.

Por eso, y para afianzar la responsabilidad de los gestores públicos, el presidente gallego ha pedido distinguir entre las administraciones que cumplen "con sus deberes contables" y las que no lo hacen, "perjudicándose a sí mismas y a la vez contaminando al resto". Así, ha anunciado que su Gobierno va a aprobar una "batería de medidas" dirigidas a las entidades locales y, en concreto, ha adelantado que prepara un decreto para que los municipios que no rindan cuentas anualmente "como es preceptivo" no reciban ayudas de la Xunta.

A cambio, se buscará primar a las entidades locales que se asocien con otras, que se unan para prestar servicios reduciendo costes, que logren mejorar la calidad "pero de forma más eficiente". "No tiene sentido que se exija lo mismo a quien se esfuerza y cumple, que a los que no", ha insistido.

Para el presidente de la Xunta, debe tener un precio gastar por encima de las posibilidades, lo que ha calificado de "malgastar", y ha puesto a su propio gobierno como ejemplo de austeridad y de gestión. "Aunque no es meritorio, sólo hemos intentado cumplir con nuestra obligación", ha apuntado.

GALICIA YA HA TOMADO MEDIDAS

En cuanto a su labor en Galicia, Feijóo ha defendido que los dos años de gobierno autonómico que llevan les han permitido adelantar medidas que en el país tendrá que afrontar, como un plan de austeridad, un plan estratégico 2010-2014 y la estabilidad presupuestaria, con la aprobación de una ley de techo de gasto. Con respecto a los presupuestos de 2012, ha anunciado que tendrán unas cifras similares a los de 2006, pero que por primera vez en tres años no registrarán "un descenso abrupto" con respecto al ejercicio anterior, 2011.

En cuanto a una de las medidas que ha adoptado la Xunta, como imponer a los docentes de la enseñanza pública pasar de 21 a 25 horas lectivas, el presidente de la Xunta ha asegurado que ese horario es el que tienen la mayoría de las comunidades y también la mayoría de las gobernadas hasta ahora por el PSOE, como Andalucía, Castilla-La Mancha o Asturias. "¿Homologar el horario de los profesores gallegos al resto de los profesores españoles es un recorte?", ha preguntado.

Pero además de controlar el gasto e imponer penas a los que no contabilizan sus facturas, el presidente de la Xunta de Galicia ha abogado este lunes por "un gran acuerdo nacional" entre Gobiernos central, comunidades autónomas y entidades locales y "asumir la realidad" de las cuentas públicas, frente a la "confrontación" y la "ficción económica".

"Al próximo Gobierno de España hay que pedirle que nos cuente la verdad; somos elegidos para gestionar la realidad y no para interpretar una película de ficción", ha manifestado Feijóo, que también ha demandado al nuevo Gobierno que, "en lugar de la confrontación permanente y de gobernar por decreto ley improvisando", forje un "gran acuerdo nacional" con las comunidades autónomas y las entidades locales "para asumir la realidad, gobernar con sentido común y recuperar la unidad".

El presidente gallego ha exigido además al Ejecutivo que salga de las urnas el 20 de noviembre que aumente a diez años el plazo de devolución al Estado de los anticipos a cuenta correspondiente a los ejercicios de 2008 y 2009, ya que, a su juicio, el Gobierno cometió una "falta de rigor premeditada" en los presupuestos de 2008 y 2009.

Núñez-Feijóo se ha referido asimismo a la fusión de las dos cajas gallegas, de la que ha dicho que era "la propuesta mayoritaria de la sociedad", y se ha ratificado en que era "la única posibilidad de que no se diluyeran" Caixa Galicia y Caixanova, mientras que ha censurado el papel del Banco de España como supervisor del sistema financiero. "Sin fusión, no habría ninguna caja gallega", ha afirmado.