Al hilo de ese informe del grupo de trabajo de Naciones Unidas sobre desapariciones forzosas, Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) y el Grupo Mixto pidieron la comparecencia extraordinaria del presidente Mariano Rajoy, del ministro de Justicia, Alberto Ruiz Galardón, y del fiscal general, Eduardo Torres Dulce. Por su parte, el PSOE reclamó explicaciones a la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría.
Así lo han defendido este martes en la Diputación Permanente del Congreso el portavoz de Justicia de IU, Gaspar Llamazares, y el portavoz socialista en la Comisión de la Unión Europea, Juan Moscoso, entre otros diputados.
El ponente del PP, Pedro Gómez de la Serna, ha rechazado dar vía libre a esas comparecencias extraordinarias alegando que todavía falta un mes para responder a las demandas del grupo de trabajo de la ONU, que en su opinión aún no ha emitido un informe definitivo.
Es más, ha asegurado que el Gobierno está de acuerdo en "muchas" de las cuestiones planteadas y que piensa atender "el espíritu del informe". Como ejemplo, ha citado que el Gobierno ya ha retirado el 86% de los símbolos del franquismo que se habían inventariado, y el resto exige medidas adicionales por su carácter histórico o artístico.
Gómez de la Serna ha acabado pidiendo zanjar el debate político sobre la Guerra Civil y el Franquismo: "Espero que en este país no tardemos, como Estados Unidos, 100 años en superar, desde el punto de vista ideológico y traumático, una guerra civil que lo fue --ha dicho--. Y dependerá de nosotros y de no creer que la utilización de la guerra nos beneficia y nos aporta un plus identitario".