Así se ha pronunciado en la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces al ser preguntado si la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, debería ser más dura con Rufián, quién en las sesiones de control al Gobierno de los miércoles ha llegado a acudir con una impresora e incluso con unas esposas.
"Espero que cada diputado esté a la altura y sea consecuente con la representación parlamentaria que implica haber obtenido un respaldo de la gente", ha afirmado Hernando, que ha señalado que esa "forma rufianesca" de actuar se está convirtiendo en algo habitual en la Cámara ante comportamientos como los que exhibe el diputado republicano.
Por todo ello, ha solicitado a Rufián que se "respete a sí mismo" y esos "numeritos no los practique", así como que abandone ese "tono chulesco y desafiante" que, a su juicio, emplea cuando sube y baja de su escaño dentro del hemiciclo.
Tras insistir en que ese estilo "no es apropiado para la Cámara", ha expresado su deseo de que "cambie su actitud" porque le puede llevar, no a que se convierta en un "personaje" sino que acabe convirtiéndose en un "personajillo", algo que "no es bueno ni para Rufián, ni para su partido ni para la Cámara".