El secretario de Comunicación del Partido Socialista de Madrid (PSM), Enrique Cascallana, ha afirmado este lunes, en el que se cumplen diez años del 'Tamayazo', que tras ese hecho el PSM se quedó "en estado de shock, de parálisis", pero los socialistas madrileños lo superaron, y ahora no ocurriría algo así.
"Fue un impacto que nos dejó durante un tiempo en un estado de shock. Ese hecho nos dejó en una situación un poco de parálisis interna. Fuimos capaces de superar esa situación, analizar nuestros errores, que los hubo, y de ponernos en marcha para retomar un proyecto político como el que Tomás Gómez está representando en la Comunidad de Madrid", ha asegurado Cascallana en rueda de prensa tras la reunión de la Ejecutiva socialista.
Cascallana ha afirmado que "claro que fue un impacto para los socialistas", pero preguntado por si esto podría suceder en la actualidad en el PSM, ha dicho que "parece evidente que no".
"Parece evidente hemos aprendido de estas cosas, el PSM es un partido que toma decisiones con autonomía buscando la capacidad y el mérito y con una cohesión muy importante en los lugares en los que esta representado", ha aseverado.
LOS "BENEFICIADOS": AGUIRRE Y GONZÁLEZ
En su intervención, Cascallana ha afirmado que "hubo alguien que se benefició" del 'Tamayazo', la decisión de los diputados socialistas Renovadores por la Base, Eduardo Tamayo y Teresa Sáez, que se ausentaron del pleno de constitución de la Asamblea de Madrid tras las elecciones de 2003.
"En este caso era la presidente en su momento, Esperanza Aguirre y el actual presidente, Ignacio González", ha añadido a renglón seguido para destacar que fue un asunto "muy turbio", un "asunto de cloaca" en el que no participaron los socialistas madrileños.
"Sería de locos hablar de complicidad de los socialistas para perder un Gobierno en la Comunidad de Madrid", ha exclamado Cascallana, quien sí señala que la responsabilidad del PSOE reside en la elaboración de las listas electorales.
Sin embargo, preguntado por las razones que llevaron al PSOE a tener a estos dos Renovadores por la Base en las listas electorales que Rafael Simancas encabezó en 2003, ha dicho que eso hay que preguntárselo "a quien se empeñó" y "si se empeñó".
"Fue un tema muy oscuro de la política madrileña", ha recalcado el socialista, quien ha considerado que lo que supuso es la llegada de un gobierno "de las mismas características que como se formó".
"Se formó en la oscuridad y en 2013 seguimos con un gobierno oscuro, poco transparente y permanentemente sospechoso de corruptelas", ha apuntado Cascallana, quien ha sostenido que las "víctimas" han sido los madrileños que "querían un cambio".