La dirección federal del PSOE ha dejado ya claro que no aprobará estas listas, pero las negociaciones sin embargo continúan en el caso de la Comunidad Valenciana, y ha habido contactos en Aragón y Baleares, aunque 'Ferraz' cree que estas últimas no darán resultados.
El objetivo de buscar una única candidatura es contrarrestar los efectos del peculiar sistema de elección del Senado. Es de listas abiertas, pero los votantes tienden a elegir a los candidatos de un mismo partido: si hay cuatro puestos en liza, se pueden marcar tres nombres en la papeleta y los electores suelen optar por los de una misma candidatura, no reparten en general las 'x' entre varias.
Esta es la razón por la que un solo partido puede lograr una amplia mayoría de senadores, porque en cada provincia se lleva tres y deja sólo uno para otra formación. Con los datos del 20D, el resultado sería muy distinto de sumar los votos que obtuvieron por separado los candidatos del PSOE, Podemos e IU, junto a formaciones como Compromís (Comunidad Valenciana) y MES (Baleares).
En la Comunidad Valenciana, el PP logró nueve senadores, el PSOE dos y Podemos uno. Ahora, la lista de izquierdas pasaría de tres a nueve y el PP, al revés, de nueve a tres, según los cálculos realizados por Europa Press.
Algo similar ocurriría en Aragón, donde los socialistas obtuvieron tres senadores en diciembre frente a los nueve del PP. Sumando los resultados de los candidatos del PSOE, Podemos y Unidad Popular, una nueva candidatura con ellos lograría dar la vuelta a la tortilla: sumarían nueve parlamentarios y dejarían al PP con tres.
Por último, en las Islas Baleares los 'populares' perderían también tres escaños y se quedarían con uno, mientras que una hipotética lista de izquierda pasaría de lograr un senador (el que logró Podemos el 20D) a cuatro.