Un exjefe de prensa de Pujol asegura que miembros del Govern alertaron sobre sus hijos

EUROPA PRESS 16/02/2015 22:35

El jefe de prensa de la Presidencia de la Generalitat entre 1988 y 1998, Ramon Pedrós, ha asegurado este lunes que miembros de los gobiernos de Jordi Pujol alertaron al presidente catalán sobre la conducta de sus hijos y la posibilidad de que hubiera irregularidades.

En su intervención ante el Parlament en la comisión de investigación del fraude, la evasión fiscal y la corrupción, ha explicado que por lo menos dos secretarios generales de la Presidencia de Pujol --Joaquim Triadú y Joaquim Pujol-- hablaron con Pujol sobre sus hijos.

Ha añadido que, aunque no le consta, está "convencido" de que también cuando el actual alcalde de Barcelona, Xavier Trias, desempeñó ese cargo mantuvo alguna conversación con el presidente de la Generalitat sobre este asunto.

Pedrós ha revelado que existía cierto "malestar" en el departamento de Presidencia de la Generalitat con el hecho de que la mujer de Pujol, Marta Ferrusola, hiciera demandas a la Generalitat en favor de sus hijos, pero no ha concretado de qué tipo de peticiones se trataba.

De su experiencia personal con Ferrusola, ha explicado que una vez ella le llamó directamente para pedirle un comunicado desmintiendo una información publicada sobre los negocios de los hijos de Pujol, y que al pedirle un encuentro para tener datos que sustentasen el desmentido ella decidió acudir directamente a su superior, entonces Joaquim Pujol.

Ha explicado que Pujol tenía cierto "complejo de mal padre" porque no había podido pasar mucho tiempo con sus hijos, y ha interpretado que para compensar más tarde les dejaba hacer sin entrometerse mucho en sus actuaciones.

Como ha hecho antes el cofundador de Banca Catalana y cuñado de Pujol, Francesc Cabana, Pedrós ha definido al expresidente como una persona a la que no le interesaba el dinero y que nunca lo llevaba encima, y ha puesto como ejemplo que todavía le debe mil pesetas que tuvo que poner él para comprar un libro a unas chicas que los vendían en la calle.