Pujol, cansado y con problemas de audición, se muestra "colaborador" en la Audiencia Nacional

EUROPA PRESS 10/02/2016 19:08

Pujol, llegaba a la sede judicial quince minutos antes de la hora fijada, acompañado de su mujer Marta Ferrusola, ambos investigados por un delito continuado de blanqueo de capitales. Tras recorrer, bajo la atenta mirada de decenas de medios de comunicación, el 'paseíllo' de 200 metros que le separaba del acceso al edificio, tuvo que esperar tres cuartos de hora a que la declaración comenzara.

Una vez dentro de la sala donde el juez y los fiscales Anticorrupción Fernando Bermejo y Belén Suárez le esperaban, el expresident ha declinado el ofrecimiento de contestar en catalán a las preguntas formuladas. Lo mismo ha hecho su esposa que ha contestado "en español, en español" cuando le han ofrecido un traductor de catalán. Al final, no ha hecho uso de ninguna de las dos lenguas porque se ha negado a declarar.

No obstante, Pujol ha contestado a todas las preguntas que le han formulado, aunque, en ocasiones, sus explicaciones no han resultado todo lo claras que hubieran deseado los allí presentes, y, en otras se ha decantado por limitarse a un contundente "no".

Ese ha sido el caso del bloque relacionado con la cuenta de Andorra con fondos de más de un millón de euros que, según un documento de un gestor, le pertenecían.

RECONCILIACIÓN DE LA PAREJA

Sobre el depósito de Banca Reig, del que sería el titular real, Pujol ha reiterado que se prestó a fingir que ese dinero era suyo y no de su hijo mayor para evitar que los fondos acabaran en el bolsillo de la exmujer de su primogénito, Mercé Gironés.

Así, ha precisado que la carta que le reconoce como auténtico propietario de los fondos, se preparó para ayudar en un intento de reconciliación de la pareja en 2001 y dar credibilidad a la versión que mantuvo su hijo durante el divorcio, cuando desmintió que poseía ese dinero para no tener que dividirlo con su ex.

Según las citadas fuentes, esta cuestión pareció incomodar particularmente a Pujol, que reconoció que no está "orgulloso" de aquella maniobra.

El expresidente ha negado tener conocimiento de los movimientos económicos gestionados por su hijo mayor en cuentas de Andorra y que, según su versión, se nutren de la herencia recibida de su padre Florenci Pujol. La existencia de esos depósitos "le incomodaban" por su condición de máximo mandatario catalán y prefería no enterarse de "nada", ha indicado otra fuente.

A su salida de la Audiencia Nacional ha escuchado el grito encolerizado de una persona anónima que le ha espetado "Ladrón", antes de subir con dificultad a un monovolumen que le aguardaba en la calle Génova de Madrid. Jordi Pujol Ferrusola tomará mañana el revelo ante el juez tras solicitar declarar de forma voluntaria.