"Es una reacción absolutamente diplomática y tradicional, son las formas y usos como se debaten las cosas entre los Estados, no ha habido ninguna reacción destemplada", manifestó García Belaúnde a Radio Programas del Perú (RPP).
El gobierno venezolano anunció el lunes, poco después de que se le concediera el asilo político a Rosales por razones humanitarias, una "evaluación integral" de sus relaciones con Perú y ordenó el retorno de su embajador en Lima para consultas, situación que para García Belaúnde es comprensible en el mundo diplomático.
En ese sentido, el jefe de la diplomacia peruana indicó que las relaciones entre su país y Venezuela "han venido desarrollándose muy fluidamente en los últimos tiempos, una vez superada la etapa electoral peruana".
"Yo no veo que este tema (el asilo a Rosales) deba interrumpir esa fluidez", dijo.
Por ello, el canciller peruano se sintió confiado en que "Venezuela va a privilegiar de todas maneras con el Perú esta relación que es histórica".
Los dos países atravesaron una crisis diplomática por el cruce de insultos producido durante la campaña electoral en Perú en 2006 entre el entonces candidato y actual presidente peruano, Alan García, y el presidente venezolano, Hugo Chávez, que derivó en la retirada temporal de sus respectivos embajadores.
Pero el asilo político a Rosales, procesado por presunto enriquecimiento ilícito durante su gestión como gobernador del estado de Zulia, entre 2000 y 2004, un juicio que él considera "político", ha causado malestar en Venezuela.
"Creo que Venezuela tiene muy claro que el Perú es un país que no podía hacer otra cosa" (sino concederle el asilo), acotó García Belaúnde.
También ayer, el presidente de Perú, Alan García, dijo que la concesión de asilo político a Rosales, fundador de Un Nuevo Tiempo (UNT) y considerado el principal opositor a Chávez, "no alterará" las relaciones con ese país.