La cena de gala en la sede de la ONU en Nueva York ha tenido una protagonista de excepción: la Reina Sofía, que se ha convertido en el centro de todas las miradas y está viviendo, desde la distancia, estos días desde la abdicación del Rey Juan Carlos. La Reina ha sido galardonada con la medalla ‘camino a la Paz’ por su compromiso siempre con los más necesitados. Con este acto se cierra su visita a Nueva York después de participar en la reunión de la junta ejecutiva de Unicef y asistir al lanzamiento de la fundación estadounidense del Liceo de Barcelona, de la que es presidenta de Honor. El domingo acompañará al rey en el desfile de las Fuerzas Armadas.