Rubalcaba admite que no es de recibo que los autónomos tengan que pagar IVA si el Estado les debe dinero

EUROPA PRESS 07/10/2011 15:14

El candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha admitido este viernes que no es de recibo que los autónomos tengan que pagar el IVA al Estado si el Estado les debe dinero por facturas impagadas y ha avanzado que su equipo está considerando este tema para darle cabida en su programa electoral.

Rubalcaba ha realizado esta confesión durante una charla con emprendedores organizada por el partido en el Círculo de Bellas de las Artes de Madrid, que se ha prolongado durante más de dos horas y media en la que ha escuchado las propuestas y peticiones de representantes de pymes y autónomos.

Varios de los intervinientes han aprovechado para quejarse de que, con la crisis, sus deudores cada vez les pagan más tarde y alguno ha llegado a reclamar que, como propone el PP, se les exima de pagar el IVA hasta que no cobren sus facturas.

En este contexto, Rubalcaba ha asegurado que en este tema el Estado sólo puede responder de la parte que le toca, es decir, si él es el deudor, pero que no puede responsabilizarse de los impagos de otras administraciones como los ayuntamientos. No obstante, sí ha reconocido que no tiene mucho sentido que el Estado reclame el pago del IVA a una persona a la que debe dinero.

NO BAJARÁ EL IMPUESTO DE SOCIEDADES

Ante las peticiones para que, si llega al Gobierno, promueva una reducción del impuesto de sociedades, ha dejado claro que no está en sus planes bajarlo, pero sí revisar las deducciones que se aplican al mismo y redistribuirlas para que las pymes puedan beneficiarse de ellas.

Además Rubalcaba, que ha estado acompañado de la ministra de Ciencia, Cristina Garmendia, ha defendido la creación de una Agencia Financiera del Estado que agrupe al Instituto de Crédito Oficial (ICO), el Instituto de Comercio Exterior (ICEX) y el Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial (CDTI).

Su idea es que esta nueva agencia actúe como una especie de 'holding' para "coordinar, concentrar y simplificar" la actividad financiera del Estado (concesión de ayudas y subvenciones) que ahora se reparte entre varios ministerios.