"Esto no ha sido un fallo judicial, sino una orden ejecutiva del presidente de Pakistán. La nación entera sabe quién está detrás del veredicto. Es un ataque al país (...) Zardari ha cruzado todos los límites", dijo el líder de la opositora Liga Musulmana-N (PML-N) en rueda de prensa transmitida en directo por los canales paquistaníes.
Sharif, el líder político con el índice de popularidad más alto del país según los sondeos, urgió al pueblo paquistaní "a pasar a la acción para acabar con estas atrocidades" y a "levantarse contra aquellos elementos que tratan de desestabilizar" el país.
"Hemos tenido muchos altibajos en nuestra trayectoria política, pero ha llegado la hora de cambiar la historia", expuso el dirigente de la PML-N.
El TS desestimó hoy los recursos presentados por Sharif y lo declaró "inelegible" como diputado por haber sido condenado por casos criminales y de corrupción.
El Supremo ratificó así la sentencia que ya había emitido en junio pasado una corte provincial.
En su comparecencia ante la prensa, Sharif animó a sus conciudadanos a participar en el movimiento de protesta para la restauración de la judicatura, colectivo al que apoyará en una "larga marcha" que han convocado para el próximo mes de marzo.
En estos últimos meses, la Liga de Sharif ha exigido en reiteradas ocasiones que los jueces del Supremo y otras Cortes superiores expulsados por Pervez Musharraf cuando éste era presidente sean restituidos en sus cargos.
El Gobierno del Partido Popular (PPP) de Zardari ha rehabilitado a la mayoría de estos magistrados, pero lo ha hecho manteniendo en el cargo a los que tomaron posesión durante el estado de excepción que Musharraf declaró en noviembre de 2007.
Las discrepancias en torno a la restauración de la judicatura fue el motivo por el que la PML-N abandonó la coalición gubernamental el pasado agosto, poco después de haber forzado, junto al PPP, la dimisión de Musharraf.
Sharif acusó a Zardari de no querer proceder a la restauración de la judicatura por haberse beneficiado de una ordenanza de reconciliación nacional impulsada por Musharraf que posibilitó que todos los casos de corrupción abiertos en su contra fueran retirados.
También aseguró que Zardari ofreció a su formación un acuerdo a través del cual podría optar a diputado en caso de aceptar la nueva constitución de las cortes, una propuesta que Sharif rechazó.