En rueda de prensa este jueves en Barcelona, Tardà ha dicho que hubiera sido un "escándalo" que la Infanta no hubiera sido imputada, y ha sentenciado que, cuando se unen opacidad y privilegios, el resultado inevitable es la corrupción.
"Aquellos que en su momento alabaron al Rey ahora quieren vendernos la moto de que su sucesor será diferente; tras la trampa de la transición ahora quieren ir directos a la sucesión para evitar así que el pueblo decida", ha concluido el republicano.