El juez de Instrucción número 32 de Madrid, Santiago Torres, ha elevado exposición razonada a la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo para que sea este órgano el que investigue a partir de ahora las posibles injurias que pudo cometer el ex vicepresidente del Gobierno y fundador del partido Foro Asturias, Francisco Álvarez-Cascos, tras calificar a los policías que investigaron el 'caso Gürtel' de "camarilla de la policía judicial dedicada a preconstituir pruebas".
La remisión de este asunto al alto tribunal se justifica, según razona Torres en un auto dado ha conocer este viernes, en la condición de aforado de Álvarez Cascos tras obtener un escaño en la Junta General del Principado de Asturias.
En principio, los posibles delitos cometidos por diputados autonómicos son investigados por el Tribunal Superior de Justicia del territorio donde fueron cometidos. Lo que ocurre en este caso es que, según ha comunicado al juez Torres la propia Junta Genral del Principado, en este caso no consta que el ex vicepresidente del Gobierno se encontrara en Asturias al realizar las referidas manifestaciones, por lo que la competencia le corresponde al Supremo.
A partir de ahora, el Tribunal Supremo deberá resolver si acepta su competencia sobre este asunto y, en caso afirmativo, tramitará el preceptivo suplicatorio a las cortes del Principado para poder citar a declarar al diputado autonómico en calidad de imputado.
El pasado 7 de abril, Álvarez-Cascos manifestó ante el juez Santiago Torres que no quiso "faltar al respeto" a la autoridad judicial, al no acudir ayer a su citación como imputado por un presunto delito de injurias. Unos días antes, el ex vicepresidente no había comparecido a la citación judicial.
El ex vicepresidente justificó su inasistencia inicial en su estrategia de defensa, ya que su abogado, Juan Ramón Montero, presentó una declinatoria de competencia para que estos hechos se unan a la causa que investiga el Juzgado de Instrucción número 44, que tramitó una denuncia presentada en 2009 por el propio Álvarez Cascos al considerar que unas informaciones que le relacionaban con la trama 'Gürtel' atentaban contra su derecho al honor.
En esa información se sostenía que la Fiscalía Anticorrupción estaba investigando si la trama de corrupción 'Gürtel' pagó al ex ministro de Fomento un viaje a Lanzarote en 2003. "Estos hechos viene conociéndolos el Juzgado de Instrucción 44 desde 2009, en 2010 y en el año en curso. Ante esta situación y como previene la ley: los mismos hechos no pueden ser conocidos por distintos órganos judiciales", explicó Montero en dicha ocasión..
La denuncia contra Álvarez Cascos por sus declaraciones contra la policía la interpuso la asociación Preeminencia del Derecho, dirigida por el abogado José Luis Mazón, que posteriormente se retiró del procedimiento.
Esta acción penal, de la que se hizo eco entonces la Fiscalía sosstiene que Álvarez Cascos señaló durante una entrevista concedida en abril de 2010 a Onda Cero que había "una camarilla de la policía judicial, instalada en Canillas, dedicada a preconstituir pruebas".
"En mi caso, claramente dedicada a preconstituir una prueba falsa", señaló el ex vicepresidente del Gobierno, quien añadió que algunos agentes dedicados a la operación Gürtel también intervinieron en 1995 en la detención en Laos del ex director general de la Guardia Civil Luis Roldán.