El Consistorio solicitó la intervención de 43 locales comerciales, seis viviendas, cinco parcelas y 96 plazas de garaje situados en Marbella, Madrid y el municipio malagueño de Torremolinos, entre otras localidades. Muchas de ellas han sido retenidas judicialmente.
Las propiedades están registradas a nombre de las sociedades del Club Financiero Inmobiliario, Miranco, Vegangelas y las promotoras Alhambra y Alcazaba, en las que figuran como representantes los hijos del exregidor, Jesús, Miguel Ángel, Fernando y María Ángeles Gil Marín, a quienes se considera responsables contables solidarios a título lucrativo como beneficiarios de la actividad del Consistorio hasta 2006.
Desde el equipo de gobierno del PP han mostrado de nuevo a Europa Press la satisfacción por los embargos y su portavoz, Félix Romero, ha confiado en que puedan compensar, en parte, lo que salió de las arcas municipales.
En abril de 2011 una sentencia condenatoria obligaba a los herederos de Jesús Gil a devolver a la ciudad 108,3 millones de euros por transferencias sin justificar desde el Ayuntamiento a cuatro sociedades municipales entre los años 1994 y 1999.
Se trata de la misma sentencia judicial en la que fue condenado el exteniente de alcalde Pedro Román, a quien el Tribunal de Cuentas embargó 41 propiedades, entre ellas un avión, un helicóptero, 41 fincas y participaciones de una sociedad mercantil.