En sendos autos, fechados el pasado 30 de marzo, la Sala de lo Civil y Penal del TSJM rechaza así los recursos de apelación presentados por Correa y Crespo contra la resolución del pasado 4 de febrero en la que Pedreira prorrogó su situación de prisión.
La Sala estima que, en el caso de Correa, considerado el "cerebro" de la organización, subsisten en este momento las circunstancias que llevaron a rechazar anteriormente su petición de libertad provisional.
Así, insiste en que la medida cautelar de privación de libertad adoptada sigue siendo proporcionada dada la gravedad de los delitos que se le imputan -blanqueo de capitales, falsedad, delito fiscal, cohecho, tráfico de influencias y asociación ilícita- y el riesgo de fuga que considera "esencial" en este caso y que -recuerda- se demostró con los intentos del imputado de ubicar su residencia fuera de España antes de entrar en la cárcel.
También resalta las "enormes responsabilidades punitivas y civiles" que se reclaman a Correa y la evidencia de que posee importantes inversiones inmobiliarias en Colombia y actividades en Panamá, habiéndose localizado activos superiores a 17 millones de euros en Suiza.
"El recurrente, además, aparece como el principal responsable de la red de corrupción objeto de investigación, no mereciendo un trato igual al de otros" imputados en la causa, subraya el auto, del que ha sido ponente el magistrado Emilio Fernández de Castro.
Todas estas razones, y en especial el riesgo de fuga, justifican el mantenimiento en prisión de Correa, según el TSJM, que considera que la situación familiar o personal del recurrente, "que únicamente padece una crisis de ansiedad" propia de su privación de libertad puede ser tratada adecuadamente en la cárcel de Soto del Real en la que se encuentra.
En el caso del supuesto "número dos" de la trama, el exsecretario de organización del PP gallego Pablo Crespo, el auto, del que ha sido ponente el magistrado José Manuel Suárez Robledano, insiste en que también se mantienen las razones que llevaron a acordar su ingreso en prisión y que al aparecer como "el segundo responsable de la red de corrupción" tampoco merece un trato igual que otros imputados que están en libertad.
Para la Sala, "la mera manifestación de voluntad de no sustraerse a la acción de la justicia" por parte de Crespo no es suficiente contrapeso para descartar el riesgo de fuga, especialmente cuando tiene un importante número de activos patrimoniales ubicados en el extranjero y, "posiblemente, en territorios, off shore o no cooperantes".
Atendiendo todas estas circunstancias, la Sala de lo Civil y Penal considera adecuada la última fianza de 600.000 euros que Pedreira impuso a Crespo para poder salir de prisión.