Estos datos se recogen en el último Euskobarómetro realizado en base a 1.200 entrevistas realizadas entre el 7 y el 27 de mayo de 2013, presentado este viernes por su director, Francisco Llera, en las Aulas de la Experiencia de la UPV/EHU en Bilbao, junto al vicerrector del campus de Bizkaia, Carmelo Garitaoinandia, y profesor José Manuel Mata.
Tras el planteamiento en los últimos meses por parte del gobierno de la Generalitat y los nacionalistas catalanes de la demanda de independencia para Cataluña y su voluntad de convocar un referéndum sobre la misma en los próximos años, un 55 por ciento de los vascos es favorable a esta reivindicación, mientras que un 27 por ciento se muestra contrario.
En el caso del País Vasco, un 58 por ciento se muestra a favor de plantear un referéndum sobre una posible independencia de España, un 27 por ciento está en contra y un 15 por ciento no se pronuncia al respecto.
En caso de celebrarse un referéndum de independencia en el País Vasco, un 39 por ciento votaría que sí y un 34 por ciento optaría por el no, mientras que un 13 por ciento dice que se abstendría y otro 14 por ciento no muestra preferencia alguna en este momento.
No obstante, el porcentaje del 39 por ciento que votaría sí bajaría hasta el 31 por ciento si la independencia supusiese una salida de la UE y, al mismo tiempo, una pérdida de posiciones en el mercado español. En ambos casos, el sí se reduciría al 31 por ciento, optando un 2 por ciento por pasarse al no, mientras que otro 6 por ciento se lo cuestionaría.
DESEOS DE INDEPENDENCIA
Más allá de cuál sea la fórmula política del autogobierno vasco, un 37 por ciento de los vascos sigue manifestando tener deseos grandes de independencia. Frente a ellos, el 51 por ciento dice tener pocos (21%) o ningún (30%) deseo de independencia.
En la hipótesis de una Euskadi independiente, un 37 por ciento de los entrevistados piensa que se viviría mejor, un 26 por ciento opina que iríamos a peor, un 21 por ciento no sabe qué decir al respecto y un 16 por ciento cree que las cosas no cambiarían.
En medio de una división entre nacionalistas (46%) y no nacionalistas (48%), un 58 por ciento de los encuestados mantienen la compatibilidad de identidades vasca y española, con un predominio de la dualidad equilibrada (34%), a la que se añade el habitual "acento" vasquista (21%), muy superior, en todo caso, al sentimiento españolista (3%). Por otra parte, el españolismo extremo se mantiene en un 4 por ciento, mientras que el exclusivismo vasquista es la identidad expresada por 34 por ciento de los vascos.
Los vascos siguen divididos entre autonomismo, federalismo e independentismo. Así, los vascos siguen oscilando entre la actual fórmula autonómica (33%) y un posible escenario federal (33%). Frente a estas fórmulas "descentralizadoras e integracionistas", el independentismo de las fórmulas autodeterminista o confederal es defendido por el 28 por ciento de los entrevistados, mientras que el centralismo se mantiene sin pasar del apoyo del 4 por ciento de los vascos.
Un 77 por ciento de los vascos sigue mostrándose, relativamente, satisfecho con el Estatuto, mientras que los insatisfechos se mantienen alrededor de uno de cada cinco (19%).
Preguntados por las alternativas al actual estatus de autogobierno, un 22 por ciento sigue sin querer cambios, un 26 por ciento se conforma con que se completen las transferencias, un 28 por ciento opta por la reforma y la ampliación del autogobierno, mientras que un 18 por ciento se decanta con claridad por una posición de ruptura soberanista.
Transcurridos 33 años desde la celebración del referéndum que ratificó la aprobación del actual Estatuto de Gernika en el País Vasco, de celebrarse hoy un nuevo referéndum estatutario el sí volvería a rozar (45%) la mayoría del censo que votó afirmativamente en el de 1979 (53%).
Preguntada la ciudadanía por el nivel de autogobierno alcanzado por el País Vasco, un 54 por ciento lo considera insuficiente frente a algo más de un tercio que lo considera suficiente (35%) e, incluso, algo menos de uno de cada diez (7%) que lo ven excesivo. A un 65 por ciento de los entrevistados le gustaría que el grado de autonomía del País Vasco fuese mayor, frente a un 29 por ciento que lo mantendría como está y un 2 por ciento que, incluso, lo reduciría.