Todavía a la altura del número 75 de la calle Varick de Nueva York se puede apreciar las consecuencias de la guerra que se produjó entre dos edificios que albergan numerosas agencias de publicidad creativa, según recoge el portal BoredPanda.
Todo comenzó hace dos semanas, cuando una empleada escribío en una ventana un sencillo "hola" con pósits. Tras ver el escueto mensaje, sus vecinos del bloque de enfrente, le respondieron, utilizando el mismo método, con un "¿Qué pasa?". Este inocente diálogo, acabó desencadenando toda una guerra en el que la única arma era la imaginación.
Superhéroes, dibujos animados y demás símbolos empezaron a invadir las cristaleras de los dos inmuebles. Fue entonces cuando un edificio decidió terminar con la disputa y dibujó con pósits un 'Mic Drop', el conocido gesto de dejar caer un micrófono que popularizó Barack Obama hace unos meses.