La organización ha definido lo ocurrido como un "ataque vergonzoso en contra de la libertad de reunión y de expresión". El director internacional de Amnistía Internacional en el Pacífico y en el Sureste Asiático, Rafendi Djamin, ha añadido que el ataque policial "evoca los peores excesos cometidos por los antiguos regímenes dictatoriales de la región".
En un comunicado, Amnistía ha emplazado al Gobierno papú a que establezca una comisión de investigación independiente lo antes posible para identificar a los responsables del "uso innecesario y excesivo de la fuerza" durante la manifestación estudiantil.
Este miércoles, la Policía papú abrió fuego contra los participantes de una manifestación organizada por estudiantes universitarios, que protestaban pacíficamente en contra de la supuesta corrupción del primer ministro, Peter O'Neill. Varios testigos oculares declararon haber visto a manifestantes recibir disparos y golpes por parte de las fuerzas policiales.
En un comunicado, O'Neill ha culpado de los disturbios a los estudiantes, que estaban marchando de manera pacífica desde la Universidad de Puerto Moresby hasta el Parlamento. El primer ministro ha negado por completo que la Policía dirigiese los disparos contra los estudiantes y ha alegado que la intención de las autoridades era la de despejar las calles de una muchedumbre violenta mediante el uso de gas lacrimógeno y "disparos de advertencia".
El director para el Sureste Asiático de Amnistía ha declarado que la reacción del primer ministro ha sido "completamente inadecuada". "Debería asegurarse de que se lleva a cabo una investigación propiamente dicha que elabore informes sobre el uso excesivo de la fuerza. En vez de eso, ha culpado a los estudiantes por lo ocurrido y ha intentado evitar toda responsabilidad", ha añadido Djamin.
O'Neill ha anunciado en el Parlamento que la investigación que reclama Amnistía Internacional se llevará a cabo, pero no ha especificado cuándo, cómo o quién formará la comisión responsable. Las declaraciones de las autoridades papúes relacionadas con el incidente se contradicen directamente con los testimonios de los presentes en la manifestación.