El jefe policial de la zona atacada, el coronel William Alberto Montecinos, quien ha confirmado el suceso, ha dicho que los rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lanzaron morteros que impactaron contra la oficina de policía de Roberto Payán, cuyos agentes han resultado ilesos porque estaban protegidos, pero los artefactos sí han afectado a la población civil tanto del citado municipio como de las aldeas de Gorgona y Bocas del Telembí.
"Los muertos son tres niños de 8, 11 y 12 años que se hallaban en el casco urbano de la población, lo mismo que una mujer vecina de Gorgona", según ha señalado Fabio Trujillo, secretario de Gobierno de Nariño, quien agregó que dos de los menores de edad eran hombres y la otra una niña". Otro pequeño y diez adultos, siete de ellos hombres y tres mujeres, resultaron heridos en el asalto.
Las autoridades han emprendido la evacuación de los heridos de ese selvático municipio y comenzaron la persecución de los rebeldes que perpetraron el ataque. "Estamos en coordinación con la Fuerza Aérea y el Ejército para identificar a los responsables y la persecución de los mismos", añadió Montecinos.
La población atacada está situada a más de 700 kilómetros de Bogotá, en una zona selvática del litoral Pacífico fronteriza con Ecuador, en el departamento de Nariño, en la que actúan frentes guerrilleros de las FARC y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), además de nuevos grupos paramilitares y bandas de narcotraficantes.
MV