El FMI considera innecesario que Grecia tenga que reestructurar su deuda

AGENCIA EFE 12/05/2011 09:52

El director del departamento de Europa del FMI, Antonio Borges, dijo hoy en rueda de prensa en Fráncfort "que Grecia tiene ahora un programa de ayuda del FMI y estos programas están basados en la sostenibilidad de su deuda".

"Mientras haya un programa, eso significa que pensamos que la deuda de Grecia es sostenible y no es necesario reestructurar", dijo Borges.

"Soy uno de los que piensa que no hay una solución de reestructuración milagrosa", afirmó el director del departamento de Europa del FMI en la presentación de las perspectivas para el Viejo Continente en la sede del Banco Central Europeo (BCE).

"En este momento creemos que Grecia debería moverse en la dirección adecuada para lograr una posición que es sostenible. En estas circunstancias no hay necesidad de reestructuración de la deuda", según Borges.

El FMI afirmó que Grecia es un caso especial, con una deuda muy elevada pero donde el Gobierno tiene una cartera de activos extraordinariamente amplia, mucho mayor que la de otros países de Europa, y esto crea una oportunidad de vender estos activos que no existe en otros sitios.

Al mismo tiempo, el director del departamento de Europa del FMI advirtió de que el organismo puede variar su posición dependiendo de cómo progrese el programa.

Borges añadió que el FMI revisa el programa de ayuda cada tres meses y que la última revisión se produjo en febrero y "entonces estuvimos seguros de que mucho estaba en marcha" y había mejoras.

Lo que ocurre ahora es otra investigación que arrojará conclusiones en junio.

La Unión Europea, el BCE y el FMI comenzaron ayer su cuarta evaluación de la economía de Grecia.

La rentabilidad de la deuda griega a diez años es del 15,8 %, la mayor de la zona del euro, con un diferencial de 1.271,4 puntos básicos respecto a la deuda alemana (3 %), que se considera la más segura.

La rentabilidad de los bonos irlandeses a diez años es del 10,9 % y la de los portugueses del 9,4 %.

Una nueva huelga general paralizó ayer la vida pública en Grecia, en una jornada en la que se registraron enfrentamientos entre policía y manifestantes, en medio de los rumores sobre la necesidad de nuevas ayudas financieras.

Borges enfatizó que "es muy importante entender que se trata de programas a largo plazo, el programa griego es muy ambicioso, la corrección que requiere y el ajuste que implica es bastante sustancial".

El director del departamento de Europa del FMI dijo que el futuro del programa de ayuda depende del Gobierno griego y que si Grecia necesita más tiempo u otro programa de ayuda es algo que debe decidir el país.

"Grecia debe tomar la iniciativa y, de momento, no se nos ha acercado", dijo Borges.

El FMI estará disponible siempre que se produzcan las condiciones adecuadas.

Bruselas también sostiene que la reestructuración de la deuda puede tener consecuencias "devastadoras" para Grecia y provocar una contracción "sin precedentes" de la economía, bancarrotas bancarias y una "masiva restricción del crédito".

El consejero del BCE José Manuel González-Páramo advirtió de que dejar que Grecia reestructure su deuda e incurra en el impago a algunos de sus acreedores tendría "consecuencias adversas extremas", muchas de ellas "irreversibles", para la economía griega.

Borges dijo que "los 50.000 millones de euros de los que se ha hablado que el Gobierno griego tiene que privatizar es probablemente menos que el 20 % de todos los activos que Grecia podría privatizar".

La cartera de activos inmobiliarios del Gobierno griego asciende a 280.000 millones de euros, que no incluyen participaciones en empresas y en otros activos, según el FMI.

Arantxa Íñiguez