El Mercosur busca que la integración económica llegue también a sus ciudadanos

AGENCIA EFE 10/12/2010 19:20

El Tratado de Asunción, que dio vida al Mercado Común del Sur (Mercosur), cumplirá en marzo próximo veinte años como instrumento de integración económico-comercial, por lo que Brasil, país que ejerce la presidencia semestral del bloque, piensa en una visión estratégica más amplia para las próximas dos décadas.

"En Foz de Iguazú vamos a lanzar la idea del Mercosur para los próximos 20 años. El Mercosur será algo en movimiento que significará para los países no sólo comercio sino desarrollo", dijo en una conferencia en Río de Janeiro el subsecretario general para América del Sur, Central y del Caribe de la cancillería brasileña, Antonio Simoes.

La decisión de avanzar en otros campos de la integración no significa que se hayan resuelto todos los problemas en el campo económico-comercial que han afectado al Mercosur desde su creación, sino que se debe al deseo de sus cuatro socios (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) de profundizar los vínculos por otras vertientes.

En la cumbre celebrada en agosto pasado en San Juan (Argentina), se dieron pasos significativos como la aprobación del Código Aduanero del Mercosur y el lanzamiento del proceso de eliminación gradual del doble cobro del Arancel Externo Común (AEC), medidas que en los próximos años permitirán el avance del bloque, con frecuencia frenado por los conflictos entre sus socios.

Como complemento a lo aprobado en la cumbre de San Juan, Brasil quiere proponer que se retomen las discusiones para impulsar el comercio de servicios en el Mercosur, puesto que se trata de un sector en expansión que ofrece muchas oportunidades a empresas de los países del bloque.

Brasil también busca que se adopte un mecanismo que estimule las inversiones entre los países miembros pues aunque los flujos de capital en circulación han aumentado en los últimos años, conviene a todos intensificarlos.

"Cuando se trata del Mercosur, tenemos la obligación de pensar en grande. El Mercosur necesita dar un salto cualitativo más y definir metas -ambiciosas y razonables- para avanzar en la conformación plena de la unión aduanera y para la creación efectiva de un mercado común", expresó el canciller brasileño, Celso Amorim, en un discurso ante el Parlamento del Mercosur, en octubre pasado en Montevideo.

Además de los aspectos puramente económicos, la presidencia semestral del Mercosur considera que la estrategia para los próximos 20 años debe abarcar también las agendas social y ciudadana porque, según Simoes, "no se puede pensar en la integración sólo con una visión mercantilista sino también desarrollista".

"No vamos a tener apoyo para profundizar el proceso económico y social si no tenemos en cuenta a las personas", opina el diplomático.

La integración social ha dado ya los primeros pasos con la inauguración, el año pasado, del Instituto Social del Mercosur, con sede en Asunción, y con la adopción del Plan Estratégico de Acción Social (Peas), que fue discutido esta semana en Brasilia y será presentado en la X Cumbre Social del Mercosur y a los presidentes en la cumbre de Foz de Iguazú.

Según el Gobierno brasileño, este programa que incluye a los cuatro miembros plenos del Mercosur y a los asociados (Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela -este último en proceso de adhesión plena-) tiene como objetivo "combatir las desigualdades sociales y garantizar los derechos humanos, económicos, sociales y culturales, especialmente de la población más vulnerable".

Más ambiciosa es la integración ciudadana, que prevé el lanzamiento de un estatuto que incluye avances como los viajes sin necesidad de pasaporte entre los países miembros, protección diplomática y consular para todos los ciudadanos del Mercosur, así como facilidades para la obtención de la residencia permanente en otro país del bloque y para la circulación de bienes culturales.

Con estas iniciativas, Brasil, que cederá el testigo de la presidencia semestral a Paraguay, quiere comenzar a construir lo que Amorim ha definido como "un Mercosur de los pueblos".