La ONU exige a las milicias islamistas somalís el fin de su ofensiva en Mogadiscio

AGENCIA EFE 15/05/2009 18:02

"El Consejo exige que los grupos opositores pongan fin inmediatamente a su ofensiva, depongan las armas, renuncien a la violencia y se unan al proceso de reconciliación", asegura el órgano en una declaración leída hoy por su presidente de turno, el embajador de Rusia, Vitaly Churkin.

El documento consensuado por los quince miembros del Consejo de Seguridad reafirma el respaldo al Gobierno del presidente Sharif Sheik Ahmed y condena los ataques contra la capital que iniciaron hace una semana las milicias islámicas.

Afirma que la ofensiva militar es "un intento de derrocar a las autoridades legítimas por la fuerza", por lo que insta a la comunidad internacional a asistir al Gobierno somalí y a sus fuerzas de seguridad.

Al mismo tiempo, expresa la "preocupación" del Consejo por las informaciones recibidas de que la vecina Eritrea ha proporcionado armamento a los grupos armados de la oposición somalí, en violación del embargo de armas impuesto por la ONU.

"Los presentes intentos de tomar el poder por la fuerza solamente conseguirán retrasar el proceso político y aumentar el sufrimiento del pueblo somalí", resalta el texto.

La declaración emitida hoy se suma a la que el mismo Consejo adoptó el pasado miércoles, en la que manifestaron su temor a que la ofensiva de las milicias islámicas socave el progreso logrado en los últimos meses en el proceso de paz auspiciado por la ONU.

Los servicios asistenciales y organizaciones humanitarias locales dijeron hoy a Efe en la capital somalí que los siete días de combates han dejado más de 130 muertos, cientos de heridos y unos 42.000 desplazados, aunque el Gobierno ha confirmado 103 fallecidos, 420 heridos y 18.000 desplazados.

Tanto el líder radical Sheikh Hassan Dahir Aweys, al que Naciones Unidas ha acusado de querer derrocar al Gobierno, como la milicia de Al Shabab, a la que EEUU relaciona con Al Qaeda, prosiguen con su intención de desplazar a Sharif Sheikh Ahmed del poder.

Los imanes de varias mezquitas de Mogadiscio, en sus sermones de hoy viernes, el día sagrado musulmán, calificaron los combates de "inmoralidad" y exigieron que "se deje de matar a la gente".

La Misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM), que respalda al Gobierno, ha asegurado que mantendrá el control de la ciudad de Mogadiscio y pedido a los civiles que no sucumban al pánico.

Somalia no ha tenido un Gobierno central efectivo desde que el antiguo dictador militar Siad Barre fue depuesto en 1991 por los jefes de clanes tribales, conocidos como "señores de la guerra", que han dominado desde entonces el país con la ayuda de milicias fuertemente armadas.