Psicosis en los aeropuertos por la ola de amenazas terroristas

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 04/11/2010 06:46

Esta madrugada, una terminal de carga de mercancías del aeropuerto internacional John F. Kennedy, de Nueva York, ha sido evacuada como medida de precaución después de haber localizado un paquete sospechoso procedente de Yemen.

El paquete, según ha indicado la cadena de televisión NBC, llegó a la terminal de la empresa de paquetería DHL a través de un avión de la compañía aérea Emirates Airlines, de la que una de sus naves fue escoltada la semana pasada por aviones de combate F-15 cuando se desencadenó una amenaza similar.

La Agencia de Seguridad en el Transporte estadounidense (TSA, en inglés) decidió la pasada semana investigar todos los paquetes originarios de Yemen con destino a este país, mientras que las compañías de paquetería UPS, FedEx y DHL han dejado de operar temporalmente allí.

Mientras, las fuerzas de seguridad han desalojado también parte del aeropuerto de Glasgow, en Escocia, después de haber localizado un paquete sospechoso que al final ha resultado ser una falsa alarma.

El paquete fue descubierto a última hora del miércoles por un empleado del aeropuerto, según ha explicado un portavoz de las instalaciones que ha asegurado que "estamos aceptando vuelos con normalidad. No estamos cerrados, pero hemos acordonado una zona hasta que la Policía diga que es segura".

Reunión de expertos

Ante tales amenazas, la Comisión Europea y la presidencia belga de turno de la Unión Europea han convocado a un grupo de expertos en seguridad aérea para analizar este viernes los hechos.

Ante la sospecha de que existiera algún paquete bomba que pudiera dirigirse al Ejecutivo comunitario, todos los funcionarios de la Comisión Europea han recibido órdenes de no abrir directamente ningún paquete y derivarlo al servicio central de correos en Bruselas.

En los últimos días, se han sucedido varias alertas terroristas. La pasada semana fueran detectados en EE.UU. dos paquetes con cartuchos de impresora que contenían explosivos y que fueron enviados desde Yemen en aviones de carga en el Reino Unido y Dubái, con destino a dos sinagogas de Chicago. EPF