Este ha sido un gran año para Barack Obama. Además de su nueva vida en la Casa Blanca, ha conseguido el Premio Nobel de la Paz, y que mejor para celebrar el fin de año que pasar unos días de relajación en su Hawai natal con toda su familia al completo.
Tanto Obama como su esposa, Michelle, y su dos hijas Malia (11 años) y Sasha (8 años) no han querido perderse el buen tiempo que había en la paradisíaca isla de Oahu, y se les ha podido fotografiar durante estas vacaciones navideñas practicando el surf y jugando al golf o al tenis. Pero no todo es deporte para los Obama, y también han hecho hueco para acudir a un cine en tres dimensiones a ver la última película de James Cameron, Avatar; y a tomar unos helados junto a un grupo de amigos de Chicago.
El presidente de los Estados Unidos nació en Hawai en 1961, y excepto durante cuatro años, vivió en Honolulú hasta que cumplió los 18 años. Allí estudió secundaria y compaginó las clases con un trabajo como dependiente en una tienda. Desde que tomó posesión de su cargo no había acudido al archipiélago. RGM.
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