La UE aprueba que la operación 'Sophia' controle embargo de armas a Libia y entrene a sus guardacostas

EUROPA PRESS 20/06/2016 14:25

La operación Sophia, que ha contribuido a salvar cerca de 16.000 vidas, ha neutralizado 139 embarcaciones utilizadas por las mafias y ha detenido a 71 presuntos traficantes desde que comenzó en octubre su fase operativa, entrenará ahora los guardacostas y la Marina libios a petición del Gobierno libio "legítimo" para "reforzar su capacidad de desmantelar el tráfico" humano y "llevar a cabo actividades de búsqueda y rescate para salvar vidas" en aguas territoriales libias, según ha informado el Consejo de la UE en un comunicado.

También contribuirá a apoyar la aplicación del embargo de armas a Libia autorizado por la ONU en aguas internacionales frente a las costas libias después de que el Consejo de Seguridad lo haya avalado a través de la resolución 2292 a fin de "limitar los flujos de armas a Daesh y otros grupos terroristas".

La misión de la UE, que ha ampliado de manera "muy limitada" su zona de operaciones al este para incluir la ciudad de Derna, también intercambiará información a fin de aplicar el embargo de armas con las autoridades libias y se da por hecho que también intercambiará inteligencia con la OTAN una vez que el organismo de defensa euroatlántico apruebe apoyar a la operación europea, según fuentes europeas.

FASES DEL ENTRENAMIENTO

El comandante de la operación, contraalmirante italiano Enrico Credendino, ha explicado que habrá reuniones con las autoridades libias para preparar "el paquete de entrenamiento" con el objetivo de "comenzar lo antes posible el entrenamiento" que se dará en tres fases. En primer lugar habrá formación a bordo de uno de los barcos de la operación, donde podrán acoger a "hasta cien libios y algunos equipos de formación móviles" durante 14 semanas. "Comenzaremos el entrenamiento en aguas internacionales inicialmente" aunque sin descartar "ir quizá a aguas territoriales libias", ha explicado en rueda de prensa.

La segunda fase de entrenamiento, que se llevará a cabo de forma simultánea a la primera, incluirá formar a un mayor número de efectivos "en la costa de algunos Estados miembro y terceros países, incluido en Libia", ha precisado Credendino, que ha avanzado que el tercer paquete de la formación incluirá "entrenamiento operativo en el mar" a bordo de barcos libios.

La formación de los guardacostas y la Marina libios, ha precisado el comandante de la operación 'Sophia' tiene por objetivo "mejorar la capacidad de los guardacostas y la Marina libios para llevar a cabo actividades de búsqueda y rescate en aguas territoriales libias, donde hoy muere mucha gente" y "reforzar la cooperación e interoperabilidad de cara a las fases subsecuentes de la operación" en alusión a las fases que prevén si hay luz verde de la ONU o el visto bueno de Trípoli, de operar en aguas libias e incluso en la costa libia para desmantelar a las mafias que trafican con inmigrantes.

En el proceso de selección de los guardacostas y efectivos de la Marina libios que serán entrenados por la UE cooperarán Frontex, Europol e Interpol para descartar que tengan vínculos con el terrorismo. "Hay que identificar a los tipos que queremos formar y garantizar que es gente fiable" y negociar "las modalidades con los libios", han explicado fuentes diplomáticas, que han avisado de que la formación podría retrasarse "a finales de verano".

MÁS BARCOS NECESARIOS

Respecto al embargo de armas, el comandante de la operación ha recordado que la ONU ha autorizado a 'Sophia' a "tomar medidas en aguas internacionales contra barcos sospechosos, es decir, a inspeccionar, incautar y desviar estos barcos al puerto de un Estado miembro u de un país tercero".

La operación 'Sophia', que necesitará "más buques" para asumir las nuevas tareas, según fuentes militares y habrá a principio de julio una reunión para recabar posibles contribuciones de los países, podría comenzar a aplicar el embargo de armas en julio aunque para poder inspeccionar barcos sospechosos habrá "que probar que se han hecho los esfuerzos necesarios para obtener el consentimiento del país del pabellón", según fuentes diplomáticas, que admiten que la operación Sophia se ha encontrado "por casualidad" con "un barco lleno de armas", que ha tenido que dejar marchar porque no tenían mandato para actuar.

"También le ha ocurrido a Frontex", admiten las fuentes, que han explicado que la operación tiene conocimiento de la existencia de un "hub" en el Mediterráneo en el que buques grandes transfieren cargamentos de armas a embarcaciones más pequeñas. La mayor parte de las armas a Libia llegan desde Siria.

Los Veintiocho han dado luz verde a la decisión formal de ampliar las tareas de Sophía y el plan operativo pero todavía hará falta una decisión formal una vez se aclaren las cuestiones jurídicas de calado como qué se hará con las armas incautadas y los barcos que las transportan y los países concluyan los procesos de ratificación parlamentaria, como en el caso del Parlamento alemán, según han explicado fuentes diplomáticas.

El ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, ha confiado en que la formación de los guardacostas libios "pueda comentar pronto" y ha defendido que ello contribuirá a "prevenir el paso de refugiados a la frontera libia al Mediterráneo hacia Europa" y ha celebrado el respaldo "unánime" de la ONU tras un debate "muy difícil" para autorizar a la operación europea a "controlar el tráfico de armas a Libia".

Su homólogo francés, Jean-Marc Ayrault, también ha considerado un "buen éxito" el respaldo unánime de la ONU para que la operación europea controle el embargo de armas y ha defendido que "ahora hay que actuar concretamente" tras recordar que el tráfico de armas "beneficia a Daesh".

El ministro de Exteriores británico, Philip Hammond, ha defendido que recordado que Reino Unido "siempre" ha defendido ampliar las tareas de la operación porque hay que "dar un fuerte apoyo al Gobierno de unidad nacional en Libia para ayudarle a establecer su control legítimo sobre el territorio de Libia" y contribuir a "cerrar el tráfico ilegal de armas y el tráfico humano que están provocando muchos estragos en el Mediterráneo Central".