Zapatero defiende la alianza con Marruecos y elogia el "mérito" empresarial

AGENCIA EFE 06/03/2010 08:22

En la víspera de la I Cumbre entre la UE y Marruecos, Zapatero ha clausurado junto al primer ministro de Marruecos, Abás el Fasi, y el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, la reunión empresarial auspiciada por la CEOE y la patronal marroquí en Granada.

Dirigiéndose al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, ha reconocido que las empresas son "clave para la salida de la crisis" y necesitan apoyo y un "horizonte cierto" y les ha pedido "confianza", porque llega el momento de la recuperación económica.

Tras animar a los empresarios a buscar alianzas en Marruecos, Zapatero se ha mostrado "muy orgulloso" de las relaciones entre España y el reino alauí y ha elogiado la "gran amistad" de sus ministros de Asuntos Exteriores, que han superado "algunos temas a veces nada fáciles".

Ésta ha sido la única referencia a las desavenencias entre los dos países, la última protagonizada por la decisión de Marruecos de no permitir la entrada en el país de la activista saharaui Aminatu Haidar, quien permaneció en diciembre 32 días en huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote.

Haidar estará mañana en Granada y será la protagonista de las jornadas que han organizado en la ciudad las asociaciones de apoyo a la independencia del Sáhara Occidental, que concluirán con una manifestación.

Protestarán también en las calles de Granada los agricultores y el movimiento anticapitalista, mientras Zapatero, Durao Barroso y el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, celebran la primera cumbre de la UE con un país árabe en el Palacio de Carlos V en la Alhambra.

Ante los empresarios europeos y marroquíes, Barroso ha animado al país vecino a ir creando un espacio económico común en el que las mercancías y las inversiones puedan circular "libremente".

Ésa es la aspiración de los empresarios, que, en las conclusiones de su reunión, han instado a Marruecos a mejorar el clima de negocios, dotar de mayor transparencia al sistema de licitaciones públicas e impulsar un marco institucional y jurídico más favorable a la inversión.

Zapatero ha elogiado el "desarrollo y la estabilidad económica" del reino alauí y la apuesta de sus autoridades por la modernización de la economía y la apertura al exterior.

Según ha apuntado, el interés de las empresas europeas en Marruecos se basa en la existencia de trabajadores con "una notable capacidad de aprendizaje" y en las nuevas oportunidades de negocio del país, que es "una excelente plataforma" de producción y exportación hacia la UE y el Norte de África.

Al margen de los sectores tradicionales, ha apostado por colaborar en áreas como la energía y las telecomunicaciones.

Y ha subrayado en concreto la apuesta marroquí por las energías renovables, aunque los empresarios han pedido a los gobiernos que tengan en cuenta todas las fuentes, también la nuclear.

A pesar de la crisis internacional, Marruecos creció el año pasado por encima del 5 por ciento y las previsiones auguran un crecimiento superior al 3 por ciento en 2010.

Desde el año 2000, cuando entró en vigor el Acuerdo de Asociación con el reino alauí, las exportaciones europeas a este país han aumentado un 84%, hasta superar los 8.000 millones de euros, mientras que las importaciones desde Marruecos a Europa han alcanzado los 14.500 millones de euros, un 36% más que en 2000.

Europa representa ya el 60% del comercio total de Marruecos, según los datos aportados por Zapatero.

Las relaciones con España han evolucionado en la misma línea: Marruecos es el segundo mercado de exportación fuera de la UE, después de Estados Unidos, con un volumen que excede los 3.000 millones de euros anuales; y las importaciones desde Marruecos suponen ya alrededor de los 2.400 millones de euros anuales.

Las inversiones europeas en Marruecos superan los mil millones de euros anuales de media y ha contribuido particularmente España, que tiene más de quinientas empresas instaladas en el país vecino.