La demanda de interrumpir las acciones palestinas en la ONU fue planteada por Estados Unidos antes incluso de que se reanudaran las negociaciones formales de paz, ha explicado Abbas durante una reunión con miembros de su partido, Al Fatá, en la ciudad cisjordana de Ramala, según recoge el diario israelí 'Yedioth Ahronoth'.
En un primer momento rechazaron esta condición, ha explicado Abbas, pero al final Washington se comprometió formalmente a que las negociaciones se basarían en una solución de dos estados con fronteras similares a las de 1967, por lo que accedieron a paralizar su actividad ante las instituciones de la ONU.
Ahora, ha indicado el primer ministro palestino, Rami Hamdalá, pedirán la liberación de otros 250 presos, que podrían ser excarcelados a finales del mes de septiembre.
Abbas se ha referido además a la situación de las negociaciones de paz y ha explicado que hasta ahora simplemente se han revisado las posturas de cada parte, aunque ha mostrado su optimismo sobre los plazos establecidos, que fijan en entre seis y nueve meses el marco máximo de negociación.
Además, Abbas ha reiterado su compromiso de que cualquier acuerdo que se alcance con los israelíes será sometido a referéndum ante la población palestina.
Está previsto que los contactos se reanuden este martes, según la agencia de noticias palestina Maan, que cita a un alto cargo de Al Fatá, Nabil Shaath. Shaath ha explicado que hasta ahora Israel no ha planteado ninguna propuesta y que no se han producido avances.
En cuanto a la situación en Siria, el presidente Abbas ha expresado su oposición a un ataque militar estadounidense. "No habrá un estado árabe bombardeado y condenamos el uso de armas químicas por cualquiera de las dos partes. La solución en Siria debe ser política, y no militar", ha argumentado. En ese sentido, ha revelado que ha remitido un documento con una propuesta para resolver la crisis, aunque no ha concretado a quién ni cuándo.