Bebe 50 latas de refresco al día

Informativos Telecinco 21/02/2014 19:11

Esta mujer bebe alrededor de unas 50 latas al día, lo que quiere decir que consume más de tres por hora, consumo que supera su propio peso corporal.

Jakki Ballan, madre de cinco hijos, empezó a beber refrescos con sólo 14 años, y ha continuado su tradición desde entonces. Esta dependencia que lleva sufriendo desde hace más de 30 años, comenzó a agravarse cuando dejó su trabajo a jornada completa para cuidar a sus hijos, y cuando se dió cuenta de que se gastaba alrededor de 600 euros al mes en esta bebida.

Ballan insiste en que está dejando su adicción, pero aún consume 16 litros de refresco diario, y entra en pánico si no tiene acceso a una fuente constante de bebidas carbonatadas.

Actualmente se encuentra bajo tratamiento médico y acude a hipnoterapia para intentar superar su adicción despues de sufrir alucinaciones, a consecuencia del alto consumo.

"Esta adicción se está adueñando de mi vida. Ni siquiera puedo salir de mi casa si no estoy segura de que llevo suficientes botellas. No puedo ir al colegio a buscar a mis hijos si no llevo dos botellas de medio litro en mi bolso", confiesa Ballan.

Según informa el diario 'The Daily Mail', los problemas económicos no son los únicos que afectan a esta ama de casa, a las alucinaciones se le suman dolores constantes de cabeza que le hacen cuestionarse si su estado físico se verá afectado por su consumo.

"Siempre estoy cansada, pero debido a la cafeína que consumo tengo problemas para dormir, así que durante la noche, me siento y bebo más refrescos. Es un ciclo vicioso del que no parezco salir". "No salgo a la calle a socializarme, rara vez voy de compras y nunca visito una peluquería. Prefiero salir a la calle sin cigarros antes que sin refresco".

De todas las adicciones que existen, para Ballan la suya es de las más complicadas, "los alcohólicos tienen ayuda, gente adicta al tabaco puede comprar parches, y la gente drogadicta se desintoxica, pero esta es una adición real para la que nadie puede ayudarme".

Pero poco a poco, está consiguiendo salir de su gran problema, "antes solía tener tres botellas en la nevera, y otras 12 o 14 fuera. Ahora solo tengo una botella dentro de casa, y me siento muy nerviosa. Siempre estoy sudando, temblando y agitada".

Según la doctora Sarah Schenker, las bebidas con gas contienen fósforo, que no es dañino en pequeñas cantidades, pero si se consume en grandes dosis, puede ser dañar los huesos, pero lo que más me preocupa es que por beber tanto refresco, no lleva una dieta sana y equilibrada".