AI denuncia acosos a manifestantes sirios en protestas en Europa y EEUU

EUROPA PRESS 03/10/2011 21:27

Amnistía Internacional ha denunciado este lunes el "acoso" y "seguimiento sistemáticos" que han sufrido manifestantes sirios por parte de funcionarios y personas afines al régimen presidido por Bashar al Assad en las protestas celebradas en varios países europeos y en Estados Unidos.

En su informe, titulado 'The Long Reach of the Mukhabaraat', AI documenta los casos de más de 30 activistas en ocho países --Canadá, Chile, Francia, Alemania, España, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos-- que aseguran haber sufrido "intimidación" por parte de funcionarios diplomáticos y de otras personas cuyas familias habrían sufrido "hostigamiento, detención e incluso tortura".

"A través de la protesta pacífica, ciudadanos sirios expatriados han intentado llamar la atención sobre unos abusos que nuestra organización considera equivalentes a crímenes de lesa humanidad, lo que representa una amenaza para el régimen sirio", ha afirmado el investigador de Amnistía Internacional sobre Siria, Neil Sammonds.

Sammonds ha subrayado que la respuesta del régimen de Al Assad a las protestas en Europa y en Estados Unidos "ha sido poner en marcha una campaña sistemática y, en ocasiones, violenta, para intimidar a los sirios en el extranjero y silenciarlos".

"Esto no es sino otra muestra de que el Gobierno sirio no va a tolerar la opinión disidente legítima y está dispuesto a ir muy lejos para amordazar a quienes lo cuestionan públicamente", ha dicho.

En el caso de España, AI mantiene que "el presunto acoso y otros abusos cometidos contra miembros de la comunidad siria" en España y contra familiares suyos en Siria por participar en las protestas han sido de "tal gravedad" que la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio (AAPS) está preparando acciones legales ante la justicia.

Según testimonios recogidos por dicha asociación, el personal de la Embajada en Madrid ha tomado fotografías y ha grabado en vídeo las protestas frente a la delegación para identificar a los participantes y obstaculizar posteriormente cualquier trámite que esos residentes sirios en España tengan que hacer, "acosarlos e intimidarlos en sus hogares y lugares de trabajo y localizar a sus familiares en Siria para después castigarlos".

"Algunas personas se quejan de que la Embajada de Siria había declinado llevar a cabo unos trámites administrativos necesarios. Varias personas manifestaron que habían sufrido acoso de diversa índole además de insultos y amenazas", ha indicado la ONG.

Amnistía Internacional ha explicado que el periodista sirio Mazen Yaghi, promotor de varias manifestaciones vía Internet, le ha comunicado que el Centro Cultural Sirio, "al parecer dependiente de la embajada siria", "había distribuido a toda la comunidad siria en España un mensaje difamatorio por correo electrónico en el que se afirmaba que Mazen Yaghi era sospechoso de robo de dinero del Tesoro sirio y se disuadía a los destinatarios de asistir a las protestas que él estaba promoviendo". En dos de los casos presuntamente hubo agresiones durante las protestas como parte del hostigamiento y en otros dos casos resultaron afectados familiares en Siria.

La ONG ha afirmado que ha sido "especialmente grave" el caso de Imad Mouhalhel porque su hermano, Aladdin Mouhalhel, estuvo cuatro días detenido en Siria hacia mediados de julio de 2011, tiempo durante el que los agentes le mostraron fotografías y vídeos de las protestas ante la Embajada de Siria en España y le obligaron, "mediante tortura", a identificar a su hermano entre los participantes.

El 29 de agosto volvieron a detenerle y lo obligaron a telefonear a Imad para pedirle que dejara de asistir a las protestas. "Desde entonces, sus familiares, tanto en Siria como en España, no han vuelto a tener información sobre Aladdin y temen que haya muerto bajo custodia a causa de la tortura", ha asegurado AI.

AI ha incidido en que es necesario que los países de acogida tomen medidas "más contundentes" contra las Embajadas sirias acusadas de organizar estos "actos de hostigamiento e intimidación" y ha reclamado a los gobiernos de los países afectados que "protejan el derecho a la libertad de expresión y de asociación".

"Confiamos en que los gobiernos actúen ante las acusaciones verosímiles de abusos sin esperar a la presentación de denuncias formales", ha dicho Sammonds. "Muchas de las personas con las que hemos hablado tienen demasiado miedo de lo que pueda pasarles para presentar denuncia ante la Policía", ha añadido.

"Esperamos que se procese a todo funcionario responsable de tales actos y que, si en su calidad de diplomático resulta inmune al procesamiento, se le pida que abandone el país", ha concluido.

Amnistía Internacional ha asegurado que ha descubierto que el personal de las embajadas sirias grabó y fotografió a los participantes en las protestas, antes de acosarles con llamadas telefónicas y mensajes por correo electrónico y a través de Facebook para exigirles que abandonaran las manifestaciones.

Algunos activistas han relatado a la ONG que fueron "directamente" amenazados por funcionarios de su embajada. Naima Darwish, una activista que creó un página en Facebook para convocar protestas ante la Embajada de Siria en Santiago de Chile, ha asegurado que un funcionario de la legación diplomática le pidió que se reunieron y le amenazó durante el encuentro. "Me dijo que no debía hacer esas cosas. Y que perdería mi derecho a volver a Siria si perseveraba", ha explicado a AI.

Además, varios ciudadanos sirios descubrieron que familiares suyos en Siria estaban sufriendo "persecución" por parte de las fuerzas de seguridad, "aparentemente con la intención de disuadirles de continuar con sus actividades en el extranjero, con consecuencias potencialmente demoledoras".

Malek Jandali ha indicado que su madre, de 66 años, y su padre, de 73, sufrieron un ataque en su domicilio de Homs después de que Malek, pianista y compositor de 38 años, actuara en julio en una manifestación a favor de la reforma ante la Casa Blanca, en Washington (Estados Unidos).

Malek ha asegurado que sus progenitores fueron golpeados y encerrados en el cuarto de baño mientras su piso era saqueado. Según su testimonio, los agentes le dijeron a sus padres: "Esto es lo que le pasa a uno cuando su hijo se burla del Gobierno". Tras esas amenazas, el matrimonio huyó del país.

Otros activistas mantienen que el régimen ha obligado a sus ciudadanos a repudiar públicamente a los familiares que han participado en las protestas en el extranjero contra el régimen de Al Assad. Sondos Sulaiman, una activista que grabó un vídeo en junio desde Alemania en el que pedía a sus compañeros alauíes --grupo minoritario al que pertenece la familia Al Asad-- que desafiaran al régimen, ha asegurado que su hermano apareció en televisión difamándole como consecuencia de la presión de las autoridades.

"Mi hermano apareció en la televisión estatal siria denunciando este vídeo y diciendo cosas feas de mí para arruinar mi reputación. Estoy segura de que no lo hizo por voluntad propia", ha explicado. Sondos no ha podido ponerse en contacto con ningún miembro de su familia para conocer su situación, especialmente la de su hermano.

Amnistía Internacional ha emplazado al Gobierno sirio y a sus representaciones diplomáticas a que detengan el acoso contra los sirios que se han manifestado contra el régimen de Bashar al Assad en el extranjero.

"La organización pide que los familiares de estos activistas que residen dentro de Siria no sean molestados por el Ejército o las fuerzas de seguridad", ha reclamado AI, antes de subrayar que el Gobierno sirio tiene que respetar "el derecho de sus ciudadanos a la protesta pacífica".