Pese a ello, Zuma fue recibido con una gran ovación el viernes a su llegada al Hotel Saint George de Pretoria para participar en la cumbre del partido, según ha informado el diario local 'City Press'.
Los miembros del partido que respaldan a Zuma han tenido que hacer frente a las acusaciones de aquellos que están en su contra debido a su controvertida relación con la familia Gupta, centro del escándalo en los últimos días.
Según el citado diario, el grupo favorable al presidente decidió en la noche del lunes "defenderle a toda costa", incluyendo la posibilidad de "airear los trapos sucios" de aquellos que se oponen al mandatario en el seno del ANC.
El escándalo se destapó cuando el viceministro de Finanzas, Mcebisi Jonas, aseguró que la familia Gupta le ofreció ser titular de la cartera, agregando que rechazó el ofrecimiento.
La familia Gupta, de origen indio y con importantes intereses en la minería, los medios de comunicación, la energía, la informática y el turismo en Sudáfrica, ha rechazado las acusaciones, exigiendo a Jonas que presente pruebas.
Por ello, la familia --a la que la oposición acusa de tener excesiva influencia sobre el Gobierno de Zuma-- ha pedido a Jonas "que detalle el supuesto encuentro, bajo juramento, ante un tribunal".
Tras ello, Zuma compareció ante el Parlamento para rechazar las críticas de Mmusi Maimane, líder del principal partido opositor sudafricano, la Alianza Democrática, reclamándole que "pida explicaciones a Jonas o a la familia Gupta".
"No me pregunte a mí. Estoy a cargo del Gobierno y hago los nombramientos siguiendo las normas constitucionales", dijo, asegurando que Nene fue cesado por su mala gestión.