Según publica el diario Daily Mail, el niño estuvo casi dos horas en el interior de la máquina por lo que sufrió graves quemaduras e inhalación de aire muy caliente que acabó con su vida.
La madre del pequeño, Anne-Marie Gibson, ha declarado que la noche anterior a la tragedia fue a casa de un amigo a pasar el día. Así, según ha comentado, dejó a cargo del menor a dos adolescentes de la familia.
Cuando la progenitora regresó a casa se dio cuenta de que su hijo no estaba por lo que llamó a la policía que inició una búsqueda para dar con el paradero del menor.
Anne-Marie también llamó al padre del pequeño ya que ese mismo día tenía previsto irse con él de vacaciones. "Llamé a su padre para ver si había venido a recogerlo, pero yo sabía que no habría hecho esto sin decírmelo", ha comentado.
Así, tras buscar por toda la casa se encontró al pequeño en el interior de la secadora.
"Abrí la secadora y él estaba allí. La puerta de la secadora se cerró. No era más que un ovillo. Parecía que estaba durmiendo, pero yo sabía que estaba muerto", ha declarado la mujer.
Tras los hechos, la mujer fue detenida por un supuesto delito de abandono de menores pero fue puesta en libertad sin cargos días después.