La actualización de la cifra se debe a la muerte de dos aficionados a lo largo de la madrugada del viernes, que se suman a las tres personas que murieron el mismo día del accidente. Mientras, decenas de personas continúan en estado grave.
Aunque en un principio pensaba continuar con el festival, finalmente la organización ha decidido cancelarlo. "Pukkelpop está de luto, por eso es difícil que podamos continuar", recoge el comunicado publicado en su página de Facebook.
La alcaldesa ha asegurado que los servicios de emergencia están saturados, por lo que ha instado a los asistentes al festival a comunicar a sus familias que se encuentran en buen estado. En este contexto, los vecinos de Hasselt han decidido acoger provisionalmente a los afectados.
El accidente se producía alrededor de las 18.00 horas de la tarde del jueves, cuando una de las carpas se derrumbó y otra salió volando debido a la fuerte tormenta, que también derribó varios árboles y casetas, así como una torre de un escenario.
Los organizadores del festival, uno de los más conocidos en Bélgica, esperaban a unos 60.000 asistentes a la sesión de esta noche.