El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, informaba durante la madrugada del sábado de un ataque conjunto a Siria junto a sus aliados franceses y británicos. Con más de 100 misiles disparados desde barcos y aviones tripulados, los aliados atacaron tres de las principales instalaciones de armas químicas de Siria. Los objetivos incluían un centro sirio en el área metropolitana de Damasco para la investigación, desarrollo, producción y prueba de armas químicas y biológicas, así como una instalación de almacenamiento de armas químicas cerca de la ciudad de Homs. Un tercer objetivo, también cerca de Homs, fue bombardeado al, supuestamente, contener una instalación de almacenamiento de equipos de armas químicas y un puesto de comando.